Gina Mambrú vive otro capítulo de su exitosa hoja de vida como jugadora profesional de voleibol. Esta vez en Yakarta, Indonesia, donde está desde enero como refuerzo del equipo Pgn Popsivo Polwan. Aunque tenía ciertos conocimientos de la cultura oriental tras su paso por ciudades como Japón y China, nada como en esta nueva etapa de una ciudad a la que llegó el 22 de enero, un día después de su cumpleaños, en una ruta de tres aviones y 25 horas de duración.
“Me pasé el día de mi cumpleaños volando, pero valió la pena. Estoy sorprendida con todo lo que he vivido aquí y la manera en que me han recibido. Me he adaptado rápido al ambiente y al equipo. Hay una diferencia de 11 horas (con relación a la República Dominicana), pero esa es más manejable que si fuese una de seis horas. Duermo bien”, dice Mambrú a elCaribe desde la ciudad asiática.
“Cuando digo que estoy sorprendida es porque conozco Japón y China, pero aquí son muy extrovertidos, muy abiertos, conversan contigo sin temor. El ambiente es muy positivo, nos hemos familiarizado todas en el equipo”, añadió la integrante de la selección nacional.
El conjunto terminó la primera ronda con registro de 5-1, válido para ocupar el segundo puesto entre siete que compiten. Hoy se inicia la segunda fase de la justa. Su primer día con la escuadra fue el 23 y ya el 28 estaba en la duela.
El equipo es patrocinado por la Policía local. “El jefe de la Policía local fue que me hizo entrega de la franela”, dijo con una extensa sonrisa.
Mambrú tiene un contrato de varios meses con el conjunto. Se espera que vuelva en mayo al país.
En la comida
Una de las sorpresas más grandes que se ha llevado es en el aspecto culinario. Jamás pensó que vería ciertas cosas que detalla en la entrevista.
“Aquí hacen jugo de aguacate”, dijo con un tono de voz que aún guarda cierto toque de impacto ante esa realidad. “Lo hacen con leche y a veces uno se topa con algunas líneas de chocolate en la copa”.
“También aquí hay lugares que se come con las manos y me refiero a restaurantes. No hay utensilios, así que uno se faja con sus manos. Eso es divertido”, comentó. “Otra cosa, se comen el pollo entero. Literalmente entero”, agregó.
Los días libres de Mambrú son muy divertidos. “Siempre hay actividades. Vamos de compras, al cine y al zoológico. No puedo decir que me aburro cuando no tengo juego”, reveló. Algo que no ha podido manejar es el idioma, el Basha. “Ando con la traductora para arriba y para abajo. No la dejo para nada”, señaló la atacante de 31 años de edad.
Yakarta es una de las capitales más pobladas del planeta. Según wikipedia tiene un poco más de 10 millones de habitantes en una superficie de 650 kilómetros cuadrados. La mayoría de la población es musulmana y Gina ha sentido los efectos de una religión que establece ciertos límites en la forma de vestir. Mambrú también conoce las ciudades de Batam y Palembang, entre otras.
“Aún no me he podido bañar en una piscina porque aquí no permiten trajes de baños de dos piezas. Para hacerlo tiene que ser con uno como los buzos, con unas mangas y eso”, comentó.