“Cada vez que voy al ataque voy convencido (por el gol)”, dijo Mina.
Colombia, que tuvo un debut nefasto al perder 2-1 con Japón después de sufrir una expulsión apenas comenzado el partido, terminó ganando el Grupo H con seis unidades. Lo acompaña a octavos de final Japón, que finalizó empatado en todo con Senegal, pero acumuló menos tarjetas amarillas.
Polonia ocupó el cuarto puesto con tres puntos, uno menos que japoneses y senegaleses.
El próximo rival de Colombia saldrá del segundo en el Grupo H, que se definirá más tarde con el partido entre Inglaterra y Bélgica en Kaliningrado. El partido de octavos se disputará el próximo martes en el estadio Spartak de Moscú.
Los colombianos buscan repetir su histórica actuación protagonizada en Brasil hace cuatro años, cuando alcanzaron los cuartos de final.
“Esto aquí no termina”, proclamó Mina.
Colombia se quedó sin su astro James Rodríguez en el primer tiempo, aparentemente resentido de la sobrecarga muscular que le impidió jugar de entrada en el debut ante Japón.
La fortuna, sin embargo, le sonrió cuando el VAR anuló un penal que había concedido el árbitro serbio Milorad Mazic a poco de comenzado el partido, por una presunta falta de Davinson Sánchez adentro del área. El video indicó que el defensor fue a la pelota.
A Senegal le bastaba empatar para clasificarse y no forzó demasiado las cosas. Pero impuso de entrada su potencia física y no permitió a Colombia hacer su juego. El estado disminuido de James seguramente incidió para que el conjunto cafetero no lanzase casi ataques.
El ingreso de Luis Muriel por James promediando la primera etapa le dio un poco más de fuerza a Colombia y el partido se hizo más equilibrado. En la única otra acción de peligro de los colombianos en todo el partido un remate de Muriel se desvió en un rival y se fue al córner.
David Ospina preservó la victoria al contener un remate bajo en forma arrojada, exponiendo su físico ante M’Baye Niang.
“Tratamos de dar todo por mis compañeros, por la selección, por mi país”, dijo Ospina. “Siempre trato de estar muy atento cuando me necesiten”.
Casi sobre el final, Falcao fue reemplazado y le entregó la cinta de capitán a Carlos Sánchez, quien reapareció tras cumplir la suspensión de un partido por su expulsión ante Japón.
Con el silbatazo final, Mina y James chocaban manos en la cancha. En las tribunas de la Arena de Samara, los colombianos se lanzaron a una celebración bailando.