El púgil mexicano afirma que buscará temprano la victoria por nocaut. Revela no le teme a la dura pegada de Golovkin
LAS VEGAS, NEVADA (EE.UU.).- Saúl -Canelo- Álvarez no tendrá secreto el 15 de septiembre (el próximo sábado), cuando tenga de frente a su archirrival, Gennady Golovkin, a quien por segunda vez enfrentará por el campeonato mundial del peso mediano (160 libras). El boxeador mexicano, de 28 años, ha declarado que viene con pilas recargadas.
Está consciente, asimismo, que tendrá el reto más grande de su carrera profesional, en razón de que debe de demostrar, como lo ha dicho, que es “el mejor peso de las 160 libras”.
Pero también afirmó “cerrarle el pico” a Golovkin, quien le ha hecho acusaciones que no tienen ninguna base como, por ejemplo, de que en su primer combate, montado el 16 de septiembre del 2017 en la arena del coliseo T-Mobile de esta ciudad, y que terminó empate. A seis días del esperado match de puños enguantados, Canelo Álvarez aseguró que -y ha sido una reiteración- que buscará el triunfo por nocaut.
Precisó que ha visto unas diez veces la primera pelea que celebró con Golovkin (16 de septiembre del pasado año), y que terminó empatada. Un juez vio ganar a Canelo y otro votó a favor de Golovkin. Un tercer oficial la vio tablas (114-114). Este periodista anotó en su tarjeta 114-113, a favor de Canelo Álvarez.
“Voy a salir a trabajarlo para buscar el nocaut, eso haré desde el primer asalto, voy mentalizado para eso, obviamente con mucha experiencia, pero así quiero que termine la pelea, quiero que me levanten la mano después del nocaut” argumentó.
Serán presentados el miércoles
Este miércoles, ambos serán presentados en una conferencia de prensa organizada por la compañía Golden Boy Promotions. Desde San Diego, donde tuvo su cuartel de entrenamiento, Canelo Álvarez hizo sus contundentes declaraciones a través de una teleconferencia. Fue claro al repetir lo que hace días declaró a periodistas mexicanos mientras realizaba sus entrenamientos, los cuales ha realizado “con una intensidad nunca vista”, según reportes. “Me siento muy bien. Mis condiciones físicas están como nunca y eso quedará claro la noche de la pelea”, postuló.
De otro lado, también afirmó que quedará demostrado que es un atleta limpio, que no necesita hacer “trampas” para ganar sus peleas.
Sobre el particular -en declaraciones dadas hace dos semanas en San Diego-, reveló que ha ofrecido entre 15 y 20 muestras -tras exámenes antidopaje- a la Agencia Voluntaria Antidopaje (VADA)… “y en esas pruebas, he demostrado que soy un boxeador limpio”. Asimismo, reconoce que su “histórico enemigo” de Kazajistán (invicto en 39 peleas profesionales) es un boxeador de una pegada anestesiante…”, pero que esa pegada no es cosa del otro mundo”.
La noche del sábado 16 de este mes será “especial”
La noche del esperado combate “será sábado muy especial”. Será muy diferente a la que se escribió el 16 de septiembre de 2017, advierte el joven peleador mexicano.
El pasado año, en el mismo escenario (la arena del moderno coliseo T-Mobile), Canelo Álvarez y Golovkin protagonizaron un violento combate.
Canelo reafirmó que no por los sucesos (registrados en aquella pelea) en su perjuicio “yo perdí popularidad de mí gente… mis fans seguirán conmigo. Como han seguido en tanto en las buenas como en las malas”.