El Barcelona regresa hoy a la Liga de Campeones para su primer juego desde la histórica remontada de 6-1 ante el París Saint-Germain con la que se convirtió en el primer equipo en la historia del torneo en recuperarse de una desventaja de 4-0 tras el partido de ida.
Pero el cuadro catalán llega a una repetición de la final de 2015 en la que venció a la Juventus, luego de caer el sábado 2-0 ante el Málaga. En la derrota, Neymar salió expulsado, y sus posibilidades de retener el título de liga sufrieron un duro golpe.
“Eso no debería tomarse en cuenta, no cambia nada”, reconoció el técnico de la Juventus. “Barcelona es un equipo acostumbrado a los duelos de esta magnitud”.
La expulsión de Neymar significa que estará suspendido para el próximo juego de liga ante la Real Sociedad, pero su desplante de mala actitud podría valerle una suspensión adicional, colocándolo en riesgo de perderse el encuentro ante el Madrid el 23 de abril, en el que podría definirse el campeonato local.
El árbitro Gil Manzano incluyó los aplausos de Neymar en su reporte a la comisión de competencia de la federación española, que se reunirá el miércoles para decidir su suspensión.
La portada del diario deportivo Sport de Barcelona resumió la incredulidad de los seguidores del Barcelona al encabezar “IMPERDONABLE” sobre una foto de Manzano mostrándole a Neymar una merecida tarjeta roja.
El técnico blaugrana Luis Enrique, trató de desviar las críticas sobre Neymar al resaltar las decisiones de Manzano.
“Hubo entradas muy feas por detrás de ellos que se quedaron sin tarjetas y otras cometidas por nosotros fueron señaladas con amarillas”, dijo el estratega. “El reglamento está para interpretarlo, pero para todos igual”. Excusas a parte, el delantero brasileño ha gozado de un mes espectacular.