“Un rayo no cae dos veces en el mismo lugar”. Es una máxima del saber humano, pero “ahora no le hagas caso” a ese estribillo.
Porque el cinco de mayo, como ocurrió el 16 de septiembre del pasado año, Saúl Canelo Álvarez y Gennady Golovkin volverán a protagonizar una pelea por el campeonato mundial del peso mediano (160 libras).
Así ha quedado concretado tras este jueves darse a conocer que en el moderno coliseo T-Mobile de la ciudad de Las Vegas, estado de Nevada (Estados Unidos), estos dos estelares del boxeo volverán a verse las caras.
En el primer combate, montado en T-Mobile, Canelo Álvarez y Golovkin celebraron una pelea que fue calificada como “reñida, dura, pero controvertida”.
Porque algunos expertos consideraron que Golovkin había sido el auténtico ganador, pero otros analistas creen que Canelo Álvarez debió ser declarado victorioso.
Al final del pleito, los jueces determinaron que la reyerta había terminado empate. Un juez dio su voto para Golovkin (115-112), otro para Canelo Álvarez (114-113) y un tercer oficial la vio tablas (114-114).
De inmediato saltó a la palestra que, para despejar incógnitas, había que pactar una segunda riña (pelea parte II).
Es, justamente, lo que va a registrarse el cinco de mayo teniendo como escenario el T-Mobile, lugar que les ganó la batalla, como sede, a las ciudades Nueva York, Los Ágenles y Dallas (estado de Texas).
Nueva York, Los Ángeles y Dallas estaban en la “tómbola” como posibles sede del esperado segundo combate Golovkin-Canelo Álvarez, pero los más calificados expertos y los propios promotores habían vaticinado que Las Vegas volvería a ser el escenario “perfecto”.
