Una vez más, Carlos Santana, así como lo hizo en 2013, asumirá el reto de representar a la República Dominicana en el Clásico Mundial de Béisbol de 2017. “Voy a ser parte del equipo de Dominicana. Para mí es un honor y orgullo representar mi bandera”, dijo Santana a elCaribe.Manifestó que está dispuesto a jugar donde el dirigente Tony Peña entienda, a pesar de que en la versión de 2013 fue el receptor titular de la selección dominicana.
“No importa donde me pongan. La mente mía está para jugar donde el dirigente me ponga ya sea el jardín izquierdo, primera o designado”, expuso el jugador.
En ocho encuentros en la tercera versión del Clásico Mundial de Béisbol, Santana conectó dos cuadrangulares, remolcó tres carreras y culminó con un promedio de bateo de .273.
Sobre su participación con los Leones del Escogido en el torneo invernal, dijo que todavía no está seguro si podrá accionar. “No se sabe todavía, estoy preparándome a ver cómo me siento. Fue mi primer día de práctica desde que se acabó la temporada y es algo que hay que ver más allá y diré si voy a jugar o no”, dijo Santana durante las prácticas de los Leones el pasado martes.
Listo para una nueva campaña
Después de vivir un 2016 de ensueño, Carlos Santana está listo para una nueva campaña con grandes metas y con el anhelo de repetir la dosis del néctar de llegar a la fase por la corona. No sólo conectó 34 jonrones por primera ocasión en su trayectoria en las Mayores, sino que al final, la vida le sonrió con lo más valioso para un pelotero profesional: una Serie Mundial. “Perdimos, pero me sentí campeón, batallamos hasta el final. Fue una gran experiencia “, dijo Santana.
Carlos batalló en innumerables ocasiones con lesiones en la espalda durante el 2015 y regresó recuperado para las primeras semanas de la temporada que representó un desafío para Terry Francona y los Indios de Cleveland. “Me preparé para tener el éxito al final y gracias a Dios que lo tuve”, expresó Santana, quien remolcó 87 vueltas en la pasada temporada.
Ante tantas dudas y bajas por lesiones en, Santana sobresalió en su nuevo rol como abridor con un porcentaje de embasarse de .366, la octava marca más alta en la Liga Americana. De manera considerable, logró reducir la tasa de ponches (99), la más baja en su carrera de siete años en las Grandes Ligas. “Trataré de seguir haciendo un gran trabajo y pedirle a Dios que me dé salud”, dijo Carlos, de 30 años.
Más allá de su fuerza, Santana ha crecido como un defensor con experiencia en diversas posiciones incluyendo receptor, primera base, tercera base e incluso jardín izquierdo. “En la temporada muerta, tengo mi rutina tanto en el país como en Miami, y gracias a Dios he hecho muchas cosas para mantenerme en forma en Las Mayores”, indicó el quisqueyano.
De cara al 2017, Carlos reevalúa todas las metas que le aguardan por cumplir. “Ser campeón”, dijo Carlos, sonriente. “Me gustaría trabajar para ir al Juego de Estrellas”.
En tanto que, no piensa mucho que en esta temporada podría ser elegible para probar el mercado de agencia libre por primera vez, si los indios no negocian un pacto a largo plazo con él en los próximos meses. “No sé qué pasará, son cosas que no las puedo controlar, lo único que puedo controlar es mi cuerpo y tratar de jugar pelota. Ellos saben para qué doy y que tipo de pelotero soy”, manifestó Santana.