Teoscar Hernández disfruta de su estancia con los Azulejos. El dirigente John Gibbons pondera sus cualidades
Nueva York, Estados Unidos.- El gerente general de los Azulejos de Toronto, Ross Atkins, no se equivocó cuando decidió traer a Teoscar Hernández a Canadá, mucho menos, cuando destacó que el jardinero dominicano estaba en sus planes para esta campaña.
Hernández, de 25 años, no ha defraudado a pesar de afrontar algunos problemas defensivos, ha demostrado poder ocasional, por lo que podría convertirse en un bateador que puede agregarle a un equipo más de 20 cuadrangulares por temporada.
“Doy gracias a Dios porque ha permitido todo esto, es de gran orgullo, hacia mí mismo y hacia el gran trabajo que puse en la temporada muerta. Mi meta era estar el año entero en las Grandes Ligas. Fue mi meta, traté de prepararme lo más que pude para tener un buen desempeño esta temporada”, expresó Hernández a elCaribe.
Teoscar, que llegó desde los Astros de Houston en el cambio por el serpentinero zurdo Francisco Liriano el 31 de julio del año pasado, mostró poder cuando bateó ocho jonrones y remolcó 20, aunque lidió con su disciplina en el plato.
“Estoy luchando para seguir adelante. Es un proceso, uno tiene que mantenerse fuerte. Y mantenerse trabajando duro para poder rendir. Mi meta es terminar con más de 20 jonrones, pero si Dios no lo quiere así se acepta su voluntad y se sigue trabajando”, indicó Teoscar, quien batea .239, 18 bambinazos y 45 impulsadas.
Hernández, quien fue firmado originalmente por los Astros de Houston en 2011, a pesar de estar bien considerado al entrar esta campaña y durante los entrenamientos de primavera, tuvo que esperar hasta el 13 de abril cuando fue llamado para ocupar el puesto de Josh Donaldson, y se pensó que sólo sería por unos días, pero el jardinero hizo más para quedarse en el ‘Big Show’ y se convirtió en uno de los mejores bateadores de Toronto en el mes de abril con promedio por encima de .300.
“Al principio se decía que era por unos cuantos días, pero el propósito de Dios es otro. Soy muy creyente en Dios y confiaba que no me iban a bajar más con el trabajo que hice, me pude mantener gracias a Dios”, indicó Hernández, quien es oriundo de Cotuí, provincia Sánchez Ramírez.
El dirigente John Gibbons ha sido uno de los que le ha dado todo el crédito y la confianza para seguir mejorando, y confía plenamente que en su primera campaña completa en las Mayores pueda corregir todos los errores y aprender a ser un bateador de todos los días.
“Teo tiene un gran poder, todavía está aprendiendo pero él va a batear mucho. Solo es cuestión de tiempo”, dijo el piloto Gibbons.
Teoscar está consciente de la oportunidad que tiene entre sus manos, y piensa seguir trabajando duro para convertirse en una pieza sólida de los Azulejos.
“Nunca he tenido ese pensamiento de que tengo algo seguro, siempre trato de salir al terreno de juego a darlo todo, y tratar de hacer un buen trabajo para el otro día estar en la alineación”, agregó.