Sus logros recientes le aseguran ganar buen dinero antes de ser agente libre
¿Tiene Juan Soto razones para rechazar la oferta de 350 millones de dólares por 13 años que le hicieran los Nacionales de Washington? Muchas sin tener que llegar a un número determinado. Hay varias que son de peso.
A diferencia de otros talentos que han aceptado propuestas sin barajar un segundo como es el caso de Fernando Tatis III y Wander Franco, para citar dos casos, Soto ya empezó a facturar millones en las Grandes Ligas y todo indica que sus quincenas tendrán más cifras en lo adelante.
Tatis III apenas tenía 143 partidos en su carrera al momento de rubricar. Para los fines de lugar, un año completo de tiempo de servicio es de 172 días en el roster de 26 o la lista de lesionados de Grandes Ligas. Era muy difícil para el paracorto de San Pedro decirle que no a 340 millones de dólares con más de 700 mil dólares generados entre 2019 (555,000) y 2020 (219 mil 185), respectivamente, según el portal Spotrac.com.
Franco, de su lado, firmado por tres millones 825 mil dólares en 2017, llevaba 70 juegos en su registro y unos 315 mil 901 dólares cuando selló con Tampa por 182 millones de dólares y 11 años en 2021, un acuerdo que podría llegar a los 223 millones de dólares.
Soto es distinto. Debutó en 2018 y desde un principio la estrategia junto a su representante, el implacable Scott Boras, ha sido irse año por año. Firmó por un millón 500 mil dólares en 2015. En 2018, cobró 392 mil 620 dólares, luego en 2019, cuando fue campeón repartiendo palos con los Nacionales, devengó 578 mil 300, en el año de 2020, recortado por el COVID, 233 mil 111 y en 2021, ocho millones 500 mil dólares.
Con los nueve millones 704 mil 31 dólares que ha facturado, acorde al mismo portal, hay un buen colchón para esperar a la agencia libre, que en su caso le corresponde en 2025, temporada en la que tendrá 26 años. Viene de ser segundo en la premiación al Más Valioso de la Liga Nacional, lo que sumado a sus estadísticas le augura un mejor contrato en este 2022, siempre y cuando se pongan de acuerdo dueños y peloteros.
Los equipos tienen más ventaja sobre los jugadores en este tipo de casos cuando les compran los años de arbitraje. Ya el jardinero zurdo entró en ese proceso y con su talento se proyecta para cobrar buenos montos mientras se acerca a la deseada situación de firmar con el mejor postor.
Soto tiene un estilo de vida sencillo y es muy maduro para su edad. Es probablemente el mejor bateador puro del negocio, cuenta con un abogado peso pesado como Boras y trabaja tan duro como el que más para seguir sumando logros.
En la vida todo es riesgo. Es verdad. Soto se ha tomado uno y su meta es establecer nuevos parámetros. ¿Más de 400 millones? Por ahí anda el baile.