Clayton Kershaw está retrocediendo un paso en su progresión normal de lanzamiento luego de sentirse aparentemente disgustado con su trabajo en el montículo.
Kershaw se retiró del campamento de los Dodgers el jueves y no tomará la pelota por lo menos durante los próximos dos días, en lugar de eso, realizará trabajo en la sala de pesas y con los entrenadores hasta que esté autorizado para lanzar una vez más. Su próxima sesión de bullpen aún no se ha determinado.
El mánager de los Dodgers, Dave Roberts, dijo que Kershaw “no se sentía bien” cuando le lanzó a los bateadores el lunes y luego regresó al montículo el miércoles. Roberts hizo hincapié en que la espalda de Kershaw, que lo ha llevado a la lista de lesionados en las últimas tres temporadas, no es el problema.
“Sólo es un problema en el brazo”, dijo Roberts. “nadie está alarmado o preocupado”, agregó.