Jayson Tatum es el líder de unos Celtics cuya rotación principal es el bloque más sólido y temible de la liga
Nueva York.- Se busca rival para los Celtics. Ese podría ser el titular de la temporada hasta ahora de la NBA, con Boston como equipo claramente destacado mientras que en el Oeste reina la confusión sin que nadie dé un golpe en la mesa.
El All-Star, que se disputa este año en Indianápolis, sirve cada curso como momento de pausa y reflexión para todas las franquicias, que tienen una semana entera sin partidos antes de afrontar el último tercio de la temporada regular.
Unos llegan al parón con viento en popa, otros con muchos deberes por hacer y algunos todavía tienen que decidir si aspiran a colarse en los ‘playoff’ o si es hora de pensar ya en el draft de la próxima campaña.
El único equipo que ha llegado a este descanso con todas sus tareas con sobresaliente son los Celtics, líderes del Este con el mejor balance de la liga (43-12) y ya con una ventaja de 6 partidos sobre los segundos de esa conferencia, los sorprendentes y muy meritorios Cleveland Cavaliers (36-17) de Donovan Mitchell, Darius Garland y compañía.
Jayson Tatum es el líder de unos Celtics cuya rotación principal es el bloque más sólido y temible de la liga con los recién llegados Kristaps Porzingis y Jrue Holiday además de Jaylen Brown y Derrick White.
Sin dejar el Este, los Milwaukee Bucks (terceros, 35-21), otro gran aspirante al anillo a priori, son ahora un mar de dudas tras el despido de Adrian Griffin y el desembarco de un Doc Rivers que acumula un desastroso 3-7 en sus 10 primeros partidos.
La química entre Giannis Antetokounmpo y Damian Lillard no acaba de funcionar, falta fondo de armario y su defensa -especialmente en el perímetro- es un dolor de cabeza. Tampoco tienen motivos para sonreír en los Philadelphia 76ers (quintos, 32-22), que tienen lesionado y sin saber cómo ni cuándo volverá a Joel Embiid, MVP de la pasada temporada y el pilar sobre el que se edifica todo el equipo.
En cambio, soplan aires de esperanza e ilusión en el Madison Square Garden. Los New York Knicks (cuartos, 33-22) fueron el conjunto más audaz en el mercado de fichajes, incorporaron a piezas de lo más atractivas como OG Anunoby o Bojan Bogdanovic, han hecho de la garra y el sacrificio su seña de identidad y cuentan como faro con un Jalen Brunson a un nivel espectacular.
Ahora arrastran cuatro derrotas consecutivas también con un calvario de lesiones, pero si recuperan a sus efectivos los Knicks podrían ser un rival formidable en el Este.
Siempre ‘tapados’ y siempre peligrosos, los Miami Heat (séptimos, 30-25) han tenido que lidiar con un Jimmy Butler entre algodones mientras que los jóvenes y rebeldes Indiana Pacers (sextos, 31-25) han ofrecido algunos de los tramos de baloncesto más divertidos de la campaña con Tyrese Haliburton como director de orquesta.
Anarquía en el Oeste
Ningún equipo, tampoco los vigentes campeones (Denver Nuggets), ha conseguido hasta ahora tomar las riendas del salvaje Oeste y levantar la voz como candidato por encima del resto.
Como líderes llegan los Minnesota Timberwolves (39-16), una de las grandes historias de esta campaña con Anthony Edwards, el domicano Karl-Anthony Towns y Rudy Gobert por fin rindiendo al nivel que se les presuponía y haciendo gala de una defensa muy férrea.
También ha resultado muy estimulante la irrupción de los Oklahoma City Thunder (segundos, 37-17), repletos de talento joven y con un Shai-Gilgeous Alexander que ya se codea con los candidatos al MVP.
En Los Ángeles, los Clippers (terceros, 36-17) apuntaban al cielo o al infierno con el fichaje de James Harden y les ha salido cara, tanto que con Kawhi Leonard y Paul George sanos y con Russell Westbrook como agitador de la segunda unidad ahora parecen un contrincante muy serio.Por su parte, los Nuggets (cuartos, 36-19) se han desinflado tras un inicio sólido de curso, pero con el genio Nikola Jokic al timón, tal vez el favorito hasta el momento para el MVP (sería su tercer premio), conviene no descartarles por el momento.
En Phoenix (quintos, 33-22) se frotaban las manos con el trío estelar Devin Booker-Kevin Durant-Bradley Beal, pero las lesiones (sobre todo de Beal) han impedido tener una imagen fiel que permita saber cuál es el nivel real de estos Suns.
Con seis triunfos seguidos (mejor racha en activo junto a los Celtics), los Dallas Mavericks de Luka Doncic (séptimos, 32-23) parecen haber encontrado el camino tras meses de gran irregularidad y han añadido dos piezas muy interesantes como Daniel Gafford y P.J. Washington.
Capaces asimismo de lo mejor y de lo peor son Los Ángeles Lakers (novenos, 30-26). LeBron James continúa a un nivel excelente con 39 años y los de púrpura y oro conquistaron en Las Vegas el primer NBA In-Season Tournament, pero en la temporada regular caminan por el ‘play-in’ sin mucho convencimiento.
Por esa zona también están los Golden State Warriors (décimos 27-26), que han vivido muchísimas turbulencias que apuntaban al fin de su dinastía pero que se han asentado en las últimas semanas y han dejado atrás la enorme polémica en torno a Draymond Green.
Finalmente, muy lejos de los puestos de honor están los dos colistas de la liga: los Detroit Pistons (8-46 en el Este) de las 28 derrotas seguidas (peor racha en la historia de la liga) y los San Antonio Spurs (11-44) en el Oeste, que no han conseguido dar un equipo de garantías al prodigio francés Victor Wembanyama.
Líderes
El único equipo que ha llegado a este descanso fuerte son los Celtics, líderes del Este con el mejor balance de la liga (43-12).