La estrella de los Golden State Warriors, Kevin Durant, tiene una leve tensión en la pantorrilla derecha, no viajará con el equipo a Houston y será reevaluado la próxima semana, anunció ayer el equipo.
Los Warriors lideran 3-2 la semifinal de la Conferencia Oeste ante los Houston Rockets. Hoy es el sexto partido a las 9:00 p.m. Si Golden State no puede cerrar la serie, el juego decisivo será el domingo a las 3:30 de la tarde.
La lesión ocurrió con 2:11 por jugar en el tercer cuarto del quinto juego cuando Durant realizó un tiro con salto ante la oposición de Iman Shumpert.
Durant no entró en contacto con Shumpert, pero después de aterrizar, dio unos pasos por la cancha y luego se agarró la pierna derecha. Cojeaba hacia el banco de los Rockets, y después de unos momentos, fue directamente al vestuario de los Warriors.
En baja
El entrenador de los Warriors, Steve Kerr, y el guardia Stephen Curry notaron que Durant, quien ayer tuvo una resonancia magnética, estaba comprensiblemente deprimido después de la lesión, pero que había una sensación palpable de alivio dentro del vestuario de que su lesión no era más grave.
Con Durant fuera por un período de tiempo indefinido, Curry reconoció el miércoles que los Warriors tendrán que volver a la forma en que jugaron hace cuatro años, antes de que Golden State adquiriera a su estrella proveniente del Oklahoma City Thunder. ““Al final del día, todo lo que hacemos comienza con nuestra defensa”, dijo Curry.