Si algún escritor, de los tantos que hay en Estados Unidos, se lanza a escribir la historia de los presidentes que han pasado por la emblemática Casa Blanca, tendrá que citar -y además ponerlo en un lugar privilegiado- al carismático e inteligente abogado Barack Obama.
El 20 de este mes Obama, el primer mandatario negro de Norteamérica, entregará el poder al electo presidente republicano y exitoso empresario inmobiliario Donald Trump.
Después de ocho años en la Casa Blanca –un hecho singular en la historia política de USA-, el saliente jefe de Estado dejará un legado que con el paso del tiempo será altamente valorado.
Antes de irse, junto a su esposa, la primera dama Michelle Obama y sus dos hijas, hará una despedida que -pienso- impactará en la sociedad estadounidense.
La dirección de prensa del Gobierno demócrata, en una declaración dada a conocer el pasado martes, publicó: “El presidente Barack Obama pronunciará su discurso de despedida la semana próxima en Chicago, su feudo político, donde hace 8 años festejó su elección a la Casa Blanca ante una muchedumbre entusiasmada”.
Mientras que el propio mandatario reveló que “el martes diez de enero regresaré a mi casa en Chicago para despedirme de vosotros y expresaros mi reconocimiento”.
Pero para que los desmemoriados no lo olviden, ni siquiera sus más duros adversarios, lean lo que expuso Obama previo a su despedida: “Trabajamos arduamente para recuperarnos de la peor recesión en 80 años y redujimos el desempleo a su nivel más bajo en nueve años. Logramos cubrir a veinte millones de estadounidenses con seguro médico y brindar protecciones adicionales a personas que ya tenían seguro.
Conseguimos -subrayó- que todo el mundo respete más a Estados Unidos, asumimos el papel de líder en la lucha para proteger este planeta para nuestros hijos y mucho, mucho más”.
Este gran hombre, humilde, sincero, no practicante de la demagogia ni la hipocresía (política), se despide de la Casa Blanca…¡y deja un gran legado!
El estelar presidente de 55 años, y quien deja el poder con una popularidad que ronda el 57%, fue galardonado en el 2010 con el Premio Nobel de la Paz. En su mandato trabajó para que el mundo sea cada vez más tranquilo, sin guerras y en confraternidad.
Bautizo al presidente Barack Obama como ¡un gigante de la democracia en todo el orbe!