En una conversación que sostenía con unos amigos, con los que me reúno cada sábado en la peña que realizamos en una plaza de Santo Domingo, se puso el tema de El Defensor del Pueblo.
Yo, como una forma de caricaturizar el organismo que lleva ese nombre -y creado en República Dominicana para defender (¿?) a la ciudadanía-, pregunté: ¿Qué hace esa entelequia por el bien de los ciudadanos indefensos?
Un miembro del grupo, tal vez para chistar y encontrar una clara definición del término con el que bauticé a la entidad que dirige la veterana abogada Zoila Martínez Guante, me preguntó: ¿Y qué es una entelequia?
Le respondí: Es una cosa irreal, que no existe, no funciona. Algo sin estructura. Un organismo que solo tiene el nombre. Es, literalmente, una institución que no realiza ninguna labor.
En la práctica, El Defensor del Pueblo no defiende al ciudadano común que constantemente es perjudicado por las instituciones públicas y privadas que deben brindar un eficiente servicio a la sociedad. Y pongo claros ejemplos: Las compañías telefónicas, comercios, alcaldías, entre otras.
Es un organismo de orden estatal. Su principal función: Velar por el cumplimiento y la aplicación de los derechos fundamentales de la persona y vigilar la legalidad de los actos de la administración pública y de las instituciones de carácter privado o mixto que prestan servicios públicos.
Hurgando para conocer el rol que tiene que jugar en la sociedad dominicana El Defensor del Pueblo, encontré que “es el gendarme por excelencia de la protección y del cumplimiento de los derechos fundamentales que debe garantizar el Estado a los sujetos de esos derechos que son las personas”.
“El Defensor del Pueblo vigila la legalidad de los actos de la administración pública…supervisa que los actos de los funcionarios públicos se sometan estrictamente a la Constitución y a las leyes”.
“La figura de El Defensor del Pueblo se inscribe en esa dirección e instituido en nuestro país por la ley 19-01 del 1 de febrero de 2001. Se propone proteger los derechos ciudadanos, fortalecer la administración pública, preservar el Estado de Derecho e impulsar la cultura democrática”.
El Defensor del Pueblo funciona -creo que con buenos resultados- en países como México, Panamá, Perú, Costa Rica, Argentina, Uruguay. También opera en el vecino Puerto Rico.
En RD, ¿qué ha hecho, en positivo, El defensor del Pueblo?