Estudiantes en Procuraduría
Señor director: Que quieran expresar ante las autoridades el deseo de que se haga justicia, es una cosa; que quieran usar el nombre de estudiante, para exigir justicia es justo, pero engañar los sistemas de seguridad de cualquier oficina pública o privada, es lo que se critica y puede malinterpretarse.
La llegada de 9 jóvenes al antedespacho de la Procuraduría General de la República, bajo la excusa hacer un trabajo de investigación estudiantil, es una cosa, y que supuestamente pertenecen a un movimiento independiente, es otra cosa; por fin, ¿qué eran los 9 jóvenes?
Fuera de la Procuraduría estaban los verdes, la sociedad civil y un cordón policial, mientras que en las redes, personalidades y otros que desconociendo la gravedad del asunto apoyaban la ocupación de los estudiantes, ¡perdón!. Los jóvenes independientes, que fueron usados como carnada por esos grupos que buscan justicia fuera de la justicia.
¿Se violaron los derechos a los ocupantes? ¿Se violaron las normas de acceso a la Procuraduría?
Debemos recordar los hechos que han sucedido en nombre de las religiones, la democracia y otras tantas demandas a nivel mundial. Debemos cuidar el nombre Estudiante, en cualquier parte del mundo es condenado un hecho como ese, no por la razón, sino por la forma engañosa en que se hizo, ¿o acaso no estamos luchando contra la corrupción o la impunidad? Esos jóvenes tienen todo el derecho del mundo a pedir justicia, pero, ¿es justa la forma en que entraron? Fuera de la entidad fueron recibidos como héroes, incluso subieron una foto con el puño cerrado, en forma de victoria, en la foto personas ligadas a movimientos nombrados.
La PGR reiteró que es un espacio enteramente abierto al diálogo, pero siempre en un marco de respeto. Dijo que aunque ocupa una edificación pública, tal como ocurre en todas las instituciones estatales del mundo, posee áreas restringidas y normas de conducta que deben ser cumplidas por todos los usuarios y empleados, sin excepción.
Pudieron ir a los medios de comunicación, radio, prensa escrita y televisión, donde tienen garantizado un espacio, las redes sociales y muchos medios más, pero arriesgarse, es otra cosa. Hay que respetar y apoyar cualquier lucha en beneficio de los más necesitados, de los que no tienen voz, de la justicia, la impunidad, pero apoyar las violaciones de normas, es una cosa y pasarse por estudiantes es otra cosa.
José Luis Helena Soriano
Ciudadano