Santo Domingo. La Fundación Justicia y Transparencia (FJT) pidió este miércoles que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) intervenga militarmente a Haití con sus fuerzas de paz para garantizar la gobernabilidad en suelo haitiano tras el asesinato de su presidente, Jovenel Moise.
Mediante un comunicado, el presidente de la organización, Trajano Potentini, señaló que el magnicidio certifica la condición de Haití de “estado fallido” que está “a las puertas indefectiblemente de un estallido social seguido de una guerra civil, que amerita urgentemente la intervención de la comunidad internacional”.
Además, la situación en el país vecino es “una eventual amenaza sin precedentes para la República Dominicana” a juicio de Potentini, que acusó a la Cancillería dominicana de manejar “la política exterior dominico haitiana, con muchas deficiencias y debilidades”.
A esa circunstancia se une a “un manejo poco eficiente de las fuerzas armadas a la hora de salvaguardar la integridad del territorio nacional con el control fronterizo”, apuntó el presidente de la FJD.
Esta situación constituye “la amenaza más seria que tendría que sortear la República Dominicana en medio de la pandemia del covid-19, sobre todo por el impacto social que generaría la ingobernabilidad en Haití, fundamentalmente en el orden migratorio, delincuencia organizada y el tráfico internacional de drogas”.
Cree Gobierno dominicano debe declararse en alerta máxima
Para Potentini, es urgente “que el gobierno dominicano se declare en alerta máxima y disponga del cierre absoluto de la frontera dominico haitiana, triplicando la seguridad, además de activar todos los mecanismos de contención, ante la eventualidad de un estallido social o guerra civil en Haití”.
El Gobierno dominicano cerró este miércoles los pasos fronterizos terrestres con Haití tras conocerse la noticia del magnicidio y, posteriormente, la Junta de Aviación Civil (JAC) suspendió las operaciones aéreas desde y hacia Haití.
El país vecino se encuentra desde esta mañana en estado de sitio en su territorio, informó el primer ministro interino, Claude Joseph, y también se ordenó el cierre del aeropuerto de Puerto Príncipe.