Entendí la renuncia de Bosch
Señor director: Solo un genio, estudioso de la evolución de la humanidad, responsable, quien nos decía que “La política no es para hacer negocio, que si querían hacer negocios que dejaran la política”. Fundó el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) consciente del estado de pobreza del pueblo dominicano, con amplio conocimiento de la economía mundial, la tarea inmediata de la organización política fue la educación. Escribió el libro Composición Social Dominicana del cual preparó una serie de folletos para que los militantes conocieran la historia del pueblo dominicano y aprendieran: Orden parlamentario, finanzas, integridad y honestidad (rindiendo cuentas por la venta del periódico Vanguardia del pueblo y las cuotas mensuales).

La finalidad era preparar ciudadanos para la toma del poder político y completar la obra de Juan Pablo Duarte. Para el Profesor Juan Bosch, la misión del PLD como partido de liberación nacional, era representar la sociedad dominicana en su conjunto. Ese propósito fue poco a poco integrando a profesionales liberales, partidos y organizaciones democráticas y de Izquierda, organizaciones que fueron probadas previamente en acuerdos electorales. Un grupo social muy importante fue el de los obreros, el presidente del Partido acordó con la fuerza laboral representada por la Central General de Trabajadores (CGT), se agudizaron las contradicciones ideológicas, y se creó la Central de Trabajadores Mayoritaria (CGTM), que pasó a ser el brazo Sindical del PLD. Con el ingreso del sector laboral en la estructura del PLD, quedó el Partido conformado con la composición social dominicana, lo que representó un gran estímulo al Líder.

¿Qué pasó en el sexto Congreso del Partido? -La pequeña burguesía mayoritaria aprovechó el Congreso y aplicó su mayoría, reduciendo la proporción de los obreros en la dirección política del Partido, situación que molestó al Profesor Juan Bosch, provocando su renuncia del PLD.

Treinta años después, comprendo la razón válida del líder. Los gobiernos del PLD muy bien exitosos, pero, la falta de representación de la fuerza laboral en el poder político explica la no identificación de los obreros, es decir, padres de familias en los barrios, campos y ciudades, que ven impotentes a sus hijos y nietos dirigidos por bandas delincuenciales, sin poder siquiera compartir las informaciones de políticas públicas del gobierno del PLD en favor de sus sectores. Creo que aún hay tiempo de incluir y reconocer QUE DON JUAN TENIA RAZON.
Héctor Winter
CiudadanO

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