Recientemente el Clúster Turístico de Santo Domingo celebró un encuentro para hablar de turismo sostenible en nuestra capital. En su charla introductoria la presidenta Mónika Infante identificó a la ciudad como “la joya urbana del trópico, el lugar donde millones deciden tomarle el pulso a la buena vida”.
Monika afirmó que “la ciudad está de moda”, y de vivir relegada durante décadas a servir de puente para quienes buscaban nuestras playas ahora es vista y disfrutada como un “espacio vivo, lleno de color, de ritmo y de sabrosura con personas alegres”. Por esto y por mucho más, dijo, Santo Domingo es hoy la reina del Caribe y nuestra Ciudad Colonial es el núcleo turístico urbano más visitado” del país.
Los datos del Observatorio Turístico de la Ciudad Colonial informan que en el período 2016-2018 la ciudad ha recibido 1.2 millones de turistas, principalmente por los cambios introducidos en el centro histórico de la capital por el Programa de Fomento al Turismo en la Ciudad Colonial desarrollado por el Ministerio de Turismo (MITUR) con el apoyo de un crédito de 30 millones del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), al que se ha sumado la inversión privada de 100 millones de dólares para instalar nuevos negocios.
El observatorio además ha reportado que en los años 2010-2017 la llegada de turistas a la Ciudad Colonial ha crecido un 64%; y el número de negocios aumentó un 94%, y el promedio de gasto diario de estos turistas supera la media nacional. Para Mónika estas cifras “nos muestran que estamos ante un destino que se posiciona, que se revitaliza y crece cada día”.
Estos hechos y los nuevos hoteles construidos en Santo Domingo (y los que están en desarrollo) confirman la visión optimista del Clúster Turístico de Santo Domingo. Pero si queremos tener a nuestra capital con una de las columnas que sustenten el desarrollo del turismo que necesitamos, tenemos que poner atención a la agenda pendiente, que en palabras de Mónika Infante incluye entre sus principales puntos los siguientes:
1. Continuar con los esfuerzos de promoción internacional sustentada en estrategias correctas.
2. Urge desarrollar y ejecutar un plan de movilidad urbana para toda la ciudad que permita resolver el problema de tránsito, que afecta tanto a los residentes como a los turistas.
3. Continuar atacando los temas de inseguridad que puedan afectar nuestro posicionamiento internacional, aunque hay zonas muy controladas como la Ciudad Colonial.
4. Enfrentar de forma decidida el grave flagelo de la prostitución de niños, niñas y adolescentes en algunos puntos turísticos.
5. Desarrollar rutas que conecten la diversa oferta cultural de la ciudad con nuestros turistas.
6. Establecer una ruta de transporte con vocación turística entre el malecón y la Ciudad Colonial, entre otros.
Cuando participo en actividades sobre el turismo en Santo Domingo, siempre me pregunto: ¿estoy satisfecho con mi ciudad, la siento acogedora, amigable atractiva? La verdad: es que no estoy muy entusiasmado a dar un SÍ; y un centro urbano que aspira a atraer turistas, debe ser acogedor y atractivo para sus habitantes. Se trabaja, pero tenemos que acelerar el paso porque es mucho lo que aún nos falta por hacer.
