La posesión, propiedad o usufructo de la antorcha en el PLD se ha convertido en un tema muy interpretativo. Mientras el expresidente Leonel Fernández afirma que el pueblo es el propietario de la tea del poder, su compañero de partido y de la cúpula dirigencial peledeísta Temistocles Montás reclama que ahora es su turno, por “justicia histórica”. En el vecino PRD, que no está muy claro si es del lado o del frente, el símbolo que es el “jacho” está ardiendo por la posesión de la antorcha o hacha del poder en esa agrupación. Sin importar cuan caliente esté, todos quieren tener la posesión del “jacho prendío”. Los dos partidos fundados por Bosch están en guerra y no fría.

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