El diputado más joven trabaja para dejar su legado; promueve leyes en favor de la juventud

Carlos Alberto Amarante García es el legislador más joven del Congreso Nacional con tan solo 27 años de edad. Llegó en el 2016 a representar la provincia Espaillat por el Partido de la Liberación Dominicana con el ímpetu de legislar por su generación.

No oculta sus raíces, es hijo del miembro del comité político del PLD y precandidato presidencial, Carlos Amarante Baret, y lo dice con mucho orgullo. Afirma que no se siento agredido cuando se refieren a él como “el hijo de Amarante”. “Cada hijo quiere imitar a su padre y más cuando uno lo ve como un ídolo. Así se da entre los peloteros, doctores… es algo natural que los hijos de políticos incursionen en la política”. Sin embargo, el joven mocano tiene su propia identidad y trabaja en establecer su identidad política. Para ello, orienta su agenda legislativa en la representación y en la legislación a favor de los jóvenes y el deporte.

¿Quién es Carlos Alberto Amarante García?
Soy ingeniero civil de profesión. Me gusta el baloncesto, fui selección de la provincia Espaillat y siempre he estado vinculado al deporte. Apegado a mi provincia. Soy hijo de Carlos Amarante Baret, miembro del CP-PLD y precandidato presidencial por el PLD. Tengo dos hermanos y soy el hermano mayor, esa es mi familia. Me he alejado un poco del ejercicio de mi carrera para enfocarme en la política. Represento a la provincia Espaillat, soy el diputado más joven dentro del Congreso, lo que me convierte en el secretario del bufete de edad en la toma de posesiones de los presidentes que se juramentan en la Cámara de Diputados.

¿Cómo incursiona en la política?
Nací en una familia política. De manera formal inicié en ella en el 2011, cuando el presidente Danilo Medina era precandidato presidencial, nos involucramos con un movimiento de apoyo, que se llamó Jóvenes Progresistas. En enero del 2015 tomamos la decisión de aspirar, visitamos los amigos y compañeros de partido, recorrimos las calles, queríamos hacer algo diferente porque entendemos que los jóvenes debemos hacer política diferente. Nos mantenemos haciendo charlas educativas y talleres para los jóvenes. Hemos basado nuestra gestión en estar cercano a la gente, me comprometí a estar presente. En nuestra agenda hemos tratado de fortalecer la representación.

Se te ha señalado muchas veces como “el hijo de Amarante”, ¿te ha afectado que te señalen así?
No, yo me siento orgulloso de ser el hijo de Amarante y con eso no me siento agredido. En la política hay de todo y si uno no está preparado, emocionalmente te afecta. Hay que estar claro de los ideales, lo que representamos y lo que queremos lograr. Yo tomo eso de motivación, porque yo hago mi labor. En mi provincia, hago mi informe de gestión e invito a la sociedad que lo vea, para que se informen de lo que uno ha realizado. A veces la gente piensa que uno no está haciendo nada porque no están informados y yo trato de hacerles saber lo que estamos haciendo. Cuando dicen que es porque soy el hijo de fulano… yo tengo mi identidad propia, mi identidad política que estamos creando en este camino.

¿Es difícil ser joven y asumir el compromiso de representar tu provincia desde una curul?
Uno es joven y hay muchas cosas que se quiere hacer, pero la motivación es que desde este espacio podemos ayudar a las personas, hacer un cambio en la comunidad.

Desde tu posición de joven y novel, ¿cómo ves la Cámara de Diputados?
La cámara es un cuerpo pero tiene muchas partes individuales. La percepción que pueda tener la ciudadanía sobre los diputados puede ser un poco errónea, aquí hay mucha gente con deseos de hacer las cosas bien. A veces las noticias positivas que se están generando no salen a la luz pública. Hay muchísimos legisladores de los cuales se puede aprender, es una escuelita para los que están en la política, por lo que hay que tener los ojos abiertos. El Congreso para mí es un lugar para aprender.

¿Cómo ha cambiado tu perspectiva ahora que estás dentro?
A mi llegada, la presidenta era Lucía Medina, yo me sentí bien con una mujer que me dirigiera, nos orientaba a los jóvenes nuevos, pensábamos que era una tía, por lo que la transición fue buena. Cuando se está fuera solo se ve una parte, de adentro la realidad es otra. Aquí se manejan muchos intereses. Hay que cambiar la imagen de la Cámara, lograr que la gente se sienta representada y conectada con sus diputados en las comunidades y que los diputados puedan hacer una labor legislativa decente.

¿Cómo estás orientando tu laborlegislativa?
En las provincias siempre se ve a los diputados como gestores y hemos tratado de fortalecer esa parte. En mi rol de representación nos reunimos con los líderes locales y juntas de vecinos para escuchar sus inquietudes y extrapolarlas aquí.

¿Cuáles proyectos de ley has sometido?
Recientemente depositamos el proyecto de ley de control de expendio de bebidas alcohólicas en las estaciones de combustible. Nos preocupa que se haya desvirtuado el uso de la estación de combustible y la mayoría de las personas que frecuentan esos lugares son jóvenes. Van personas armadas, hay contaminación sonora, porque se hacen competencias de cual carro suena más alto. Queremos evitar con esta ley tragedias. Ese proyecto está en comisión. Estamos enfocados en la juventud. Junto al diputado Gustavo Sánchez, estamos trabajando un proyecto de ley para ayudar a los deportistas y clubes deportivos. La ley sería similar a la de cine, daría incentivo a los empresarios para que apoyen a los clubes deportivos. Que le lleguen más recursos a los clubes para que los jóvenes participen. Los jóvenes que están ocupados en el deporte se mantienen fuera de vicios y de la delincuencia.

¿Cuáles son los temas que te preocupan?
El temor mío es que los jóvenes no participen en la política. Ahora con la ley de partidos va a garantizar que todos los partidos tengan el 10% de los jóvenes en la boleta, que entre sangre nueva, la gente quiere caras nuevas. Otra preocupación es las oportunidades de los jóvenes a la hora de conseguir un empleo, que se le dificulta en dos vertientes. A algunos por falta de experiencia y a otros que tienen estudios superiores, porque entienden está sobrecalificado. La diputada Karen Ricardo sometió un proyecto de ley de primer empleo, que nosotros los seis jóvenes del Congreso lo hemos asumido, nos sentimos identificados. Al joven hay que quitarle trabas, tiene deseos de demostrar que puede hacerlo bien, pero para eso hay que darle la oportunidad. Nos encontramos con jóvenes que quieren estudiar, pero no pueden porque no tienen como mantener los estudios. Creemos que una ley en esa dirección como la que propone la diputada Karen, de ofrecer una pasantía y de la pasantía al empleo se puede mejorar la situación.

Participación
A los jóvenes no les gusta que les hablen de política, pero son la mayor cantidad de electores, los que decidirán las elecciones, deben participar”.

Exhortación
A los jóvenes, aunque sean blanco de ataques personales, hay que recordar los valores, lo que somos y lo que queremos lograr”.

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