La ciudad de Santo Domingo volvió a la normalidad ayer tras los días festivos del pasado lunes y martes, durante la celebración de Nochebuena y Navidad respectivamente.
El tránsito en las principales avenidas como la John F. Kennedy, 27 de Febrero, Winston Churchill, Abraham Lincoln, Tiradentes, Máximo Gómez, Ortega y Gasset y Núñez de Cáceres, era reducido y no fue hasta próximo al mediodía cuando la cantidad de conductores aumentó considerablemente, en especial los que ingresaban a la capital.
En tanto que, los sectores populosos domo San Carlos, Villa Juana, Villa Consuelo y Ensanche La Fe, Kennedy y Villa Francisca, los residentes se disponían a limpiar sus casas y alrededores, tras una larga jornada de celebración.
Asimismo, agentes de la Policía Nacional y la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett) se encontraban distribuidos en las locaciones neurálgicas del Distrito Nacional para brindar apoyo y protección en cualquier situación que se presentara.
Mientras los comerciantes de frutas, tubérculos y víveres volvían a sus puestos de venta para reanudar su labor acostumbrada. Algunos de ellos manifestaban que las ventas han disminuido en gran medida en comparación con años anteriores. “La cosa está floja, esto siempre se llenaba de gente comprando y hoy (ayer) no ha venido nadie todavía. La venta ha disminuido un 50% prácticamente comparado con otros años. Antes yo sacaba 1,000 plátanos pero ahora solo saco 400 y 1,000 guineos pero solo saco 600. Parece que hay poco dinero en la calle. Esperamos que para Año Nuevo las cosas mejoren y fluya el dinero”, manifestó José Sánchez, vendedor de víveres en el Ensanche La Fe.
