Donald Trump, grandes migraciones, destape de abusos en la Iglesia católica, cambios en Latinoamérica y la expansión china dominaron la escena mundial

Ha sido un año intenso. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, rodeado de escándalos y bajo la amenaza de la injerencia de Rusia a su favor en las elecciones de 2016, grandes movimientos migratorios y de refugiados, los escándalos sexuales en la Iglesia católica, asesinatos masivos y brutales en guerras locales, distensión de la posibilidad de un conflicto armado a gran escala, la encrucijada del Reino Unido frente su inminente salida de la Unión Europea, la expansión China hacia América Latina y cambios en la región, así como la guerra comercian EE.UU.-China, son sólo algunas pinceladas de lo que se ha vivido este 2018 que agoniza.

El segundo año de Trump frente a la Casa Blanca ha sido una tragicomedia. Trump le ha dado a los estadounidenses y al mundo lo que nunca se había visto: un presidente bajo sospechas creíbles de colusión con un archienemigo que influyó a través de las redes sociales para que ganara las elecciones, un mandatario que ha despedido al fiscal general, al secretario de defensa, al jefe de gabinete, al director del FBI y a más de 40 colaboradores cercanos, pero sobre todo, un jefe de Estado al que una actriz porno lo acusa de pagarle más de US$200 mil para callar encuentros sexuales.

Trump también ha demostrado que una cosa es la retórica dura e intimidante, y otra los hechos concretos. Cuando el mundo pensaba que se estaba al borde de un conflicto nuclear con Corea del Norte, en abril el presidente de EE.UU. y el líder norcoreano se reunieron y se desbordaron en elogios.

Casi lo mismo pasó con México y China. Al país azteca lo amenazó con obligarlo a pagar la construcción de un muro fronterizo, y esta misma semana dijo que México lo está financiando a través del TLC, mientras que impuso grandes aranceles a las mercancías chinas, pero en Argentina, en el marco de la cumbre del G20, acordaron una tregua.

Migraciones

El mundo también fue testigo en 2018 del impacto sin precedentes en la migración mundial. De acuerdo con la ACNUR, más de 68 millones de personas se movilizaron por tierra y mar de sus pueblos nativos para buscar una mejor vida en otras tierras, alcanzado los 25 millones de refugiados este año y cerca de 2,000 muertos.

Por primera vez se observó este fenómeno en América. Caravanas, que llegaron a sumar hasta 7,000 personas, salieron desde países centroamericanos cruzaron a México para llegar a la frontera con EE.UU. para pedir refugio.

Ante esto, la ONU aceleró el conocimiento y aprobación por abrumadora mayoría del Pacto Mundial sobre Migración y más luego del Pacto Mundial sobre Refugiados.

Violencia y guerras

La persecución étnica y religiosa en Birmania y Sudán del Sur muestra una triste vigencia en 2018. En Birmania, los rohinyás, minoría musulmana del noroeste del país, básicamente de Myanmar, fueron objeto de una brutal ola de violencia en 2017 que causó el éxodo de 725.000 personas y que se mantuvo en 2018.

En Sudán del Sur la limpieza étnica protagoniza la guerra que estalló en Sudán del Sur en 2013 dejó en 2018 miles de niños obligados a ver como violaban y asesinaban a sus madres, e incluso a participar en tales atrocidades, a la vez que civiles han sido sometidos a todo tipo de barbaridades, como degollarles o castrarles, según la ONU.

En Medio Oriente, a pesar de la desarticulación militar de Estado Islámico y la victoria del gobierno de Bashar al-Ásad en Siria sobre grupos rebeldes, con el apoyo de Rusia e Irán, la guerra continúa en distintos frentes, ahora con el ingrediente de que Estados Unidos inició la retirada de sus tropas en lo que aparenta ser un acuerdo con Turquía.

Latinoamérica

El calendario electoral y político de América en 2018 dejó grandes cambios en la región, entre los que destacan la elección del izquierdista Andrés Manuel López Obrador en México, el ultraderechista Jair Bolsonaro en Brasil y la llegada de Miguel Díaz-Canel a Cuba luego de casi 6 décadas de castrismo. Esto, sin olvidar la inestabilidad y protestas en Haití y Nicaragua.

López Obrador, elegido en julio, y Bolsonaro, en octubre, tienen en común que llegaron a la Presidencia de sus países por el descontento con la economía, la corrupción y la violencia, fenómenos muy presentes en los dos grandes países latinoamericanos.

Otro relevo histórico fue la elección de Díaz-Canel como presidente de Cuba, el 19 de abril, después de casi seis décadas de que los hermanos Fidel y Raúl Castro dirigieran la isla, y actualmente el país está inmerso en un proceso de cambio de su Constitución.

Venezuela sigue en el centro del debate de toda la política regional, la crisis que atraviesa ese país y sus relaciones han marcado de alguna manera las decisiones de los gobiernos de América.

Iglesia y acosadores en el centro de escándalos

Los informes sobre miles de casos de abusos sexuales a menores por parte del clero en varias partes del mundo y las acusaciones a la Iglesia de no haber hecho suficiente para afrontarlos han puesto en la encrucijada durante 2018 al papa Francisco, que es centro de críticas por su apertura. Asimismo, la denuncia del acoso sexual y los abusos contra mujeres, ha hecho que un movimiento que en el último año se conoce como “Me Too” (yo también) se extienda por todo el mundo y se materializa ya en una mayor toma de conciencia social y en cambios legislativos.

Nicaragua

La crisis en Nicaragua ha dejado entre 325 y 545 muertos, desaparecidos, cientos de heridos y miles de exiliados

Lula da Silva
En Brasil, Lula da Silva fue condenado a nueve años y seis meses de prisión por corrupción pasiva y lavado

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