El concluido viaje presidencial China sentó un histórico acercamiento y contabilizó en concreto un préstamo de 600 millones de dólares para la distribución eléctrica – lo que no es malo en sí pues el sector eléctrico requiere y requerirá siempre financiamiento externo fuerte-. Pero está por verse el beneficio en general de esta nueva relación. Por ejemplo, el empresario turístico Frank Rainieri ve lógico, por la experiencia con otros mercados, que pasen largos años antes de recibir un turista chino. Otra incógnita es cómo podríamos aprovechar ese enorme mercado, qué produce nuestro país, sin tanto potencial exportador, que pudiera ser de interés de China. El tiempo dirá también si se materializa la otra esperanza: grandes proyectos chinos, como el puerto de Manzanillo.

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