La Alianza por el Derecho a la Salud (Adesa) consideró ayer que la baja calidad de los servicios sanitarios incide en el aumento de las muertes neonatales en un 31% con respecto al año.
La coordinadora general de la coalición que agrupa a 56 organizaciones sociales, Alba Reyes, dijo que el solo hecho de saber que este año morirán más de tres mil recién nacidos debería ser motivo para declarar en estado de emergencia la salud pública y volcar todos los recursos que sean necesarios hacia este sector.
Lamentó que lejos de priorizar la atención estatal en salud, el Gobierno ha enviado al Congreso Nacional un proyecto de presupuesto para el 2019 en el que se reduce la partida destinada a este sector, para limitarla a un 1.8% del Producto Interno Bruto (PIB), lo que equivale a menos del 45% de la inversión promedio en América Latina.
“Adesa está muy preocupada ante el agravamiento de la terrible crisis de salud del país, la cual se traduce en muertes y proliferación de enfermedades prevenibles. Lo peor de esta situación es que el Gobierno continúa actuando como si nada estuviera pasando y no escucha las voces que claman por un cambio de rumbo en la política sanitaria”, dijo Reyes.
Piden elevar presupuesto de salud
La organización solicitó a la Comisión Bilateral que conoce el proyecto de Presupuesto enmendar el error cometido por el Poder Ejecutivo, y en consecuencia elevar las partidas destinadas a salud en correspondencia con lo establecido en la ley de Estrategia Nacional de Desarrollo, vigente desde el año 2012.
“ADESA está muy consciente de que incrementar la inversión en salud, por sí solo, no sacaría el sistema de la quiebra en que se encuentra. Además es necesario sacar la politiquería y la corrupción de los hospitales, aumentar sustancialmente la capacidad gerencial y administrativa, mejorar la rectoría y la coordinación intersectorial y priorizar el primer y segundo niveles de atención, entre otras medidas”, dijo Reyes.
