El administrador de la Empresa Distribuidora de Electricidad del Sur (Edesur ) Radhamés del Carmen, informó que la crisis eléctrica que se ha creado por la salida de varias plantas le costaría al país unos 50 millones de dólares más mensualmente, a fin de evitar que el servicio colapse.
La salida de varias plantas generadoras han hecho que el gobierno tenga que comprar energía cara. “El promedio de compra de energía ronda los 12 centavos de dólar el kilovatio por hora. Esas centrales que están entrando ronda los 30 centavos de dólar el kilovatio por hora”, indicó el administrador de Edesur. Se prevé que esa situación dure hasta el mes de febrero cuando entre la planta de Punta Catalina en funcionamiento, expresó del Carmen.
El funcionario estuvo como invitado por la comisión de energía de la Cámara de Diputados para debatir sobre un proyecto de resolución que permita instalar redes eléctricas en el municipio de Rancho Arriba, en San José de Ocoa, donde el servicio es deficitario, tanto para los hogares como para los invernaderos instalados en ese municipio.
En ese sentido, los funcionarios del sector energético explicaron a los diputados que para resolver el problema del voltaje es necesario la construcción de una línea de transmisión y la instalación de una subestación con un banco de transformadores.
El administrador de la Empresa de Generación Hidroeléctrica Dominicana (EGEHID), ingeniero Demetrio Lluberes, sostuvo que esa empresa podría cubrir parte de los gastos de la instalción de nuevos equipos eléctricos para mejorar la calidad de la electricidad servida en Rancho arriba.
El administrador de Edesur explicó a los diputados que esa línea de distribución sería instalada desde el mismo pueblo de Ocoa y no desde Monseñor Nouel, como se estaba haciendo.
Los ejecutivos de las empresas eléctricas dijeron que el problema de la electricidad de Rancho Arriba tiene solución, pero que es necesario de tiempo y dinero.