Para nadie es un secreto la baja audiencia que está viviendo la televisión a nivel mundial, sobre todo en los últimos años en que plataformas como Amazon y Netflix, por citar solo algunas, parece que son el camino por el que van desfilando los amantes de la “vieja tv”.

En su reporte anual (2017), ConsumerLab TV & Media de Ericsson, adelantó que, globalmente, la televisión lineal y el video bajo demanda (VOD) se equipararán en tres años. En Argentina, 43% del tiempo visto ya es VOD y 40 por ciento en Brasil. En Argentina y Brasil, 50 por ciento de todo el tiempo de televisión y video visto es efectuado en pantallas móviles, 30 y 22 por ciento en smartphones, respectivamente. Ante la pregunta de si la gente ya no ve televisión, la respuesta es no, porque la “gente” sí ve televisión. El tema es que no ve lo que los canales tradicionales les están ofreciendo. Muchos especialistas en medios y producciones de televisión se han dedicado a criticar el hecho de que los televidentes migren a otras ofertas televisivas, pero les falta correrse del lugar de críticos y ponerse en el lugar del televidente, ese que tiene pocas horas de tiempo libre y decide buscar entretenimiento a su gusto en la pantalla local. Al no encontrar nada atractivo, decide hacer zapping por los canales de cable, en los que pocas veces encuentra lo que busca y ahí salta el streaming.

Pero no todo está perdido. En muchos países, principalmente de América, le han buscado la vuelta para “salvar” las pantallas nacionales y “rescatar” al televidente perdido, cual hijo pródigo envuelto en los brazos tentadores de Netflix o en cualquier otra plataforma que por unos pocos pesos le ofrece lo que la tv de casa ya no puede.

Uno de estos casos es la creación de las series biográficas, generalmente de artistas o figuras de renombre que hacen que el televidente mire nuevamente con ganas a su viejo televisor de casa. En México existe una pelea por la audiencia desde hace años entre el gigante Televisa y Tv Azteca. Televisa era como un pulpo cuyos tentáculos (sus telenovelas) se extendían por todo el mundo, y dejaba prácticamente a cualquier competidor relegado a un segundo plano. Esto cambió en julio de 2016, cuando Tv Azteca estrenó la serie Hasta que te conocí, sobre la vida del fallecido cantante Juan Gabriel. La serie marcó un récord sin precedentes de audiencia para ese canal, siendo lo más visto del día y superando a Televisa con un producto dramático, por primera vez en más de 10 años, (logró un share de 35%).

En México también se han creado producciones sobre Joan Sebastian, Paquita la del Barrio, Maradona, Lupita D’Alessio, Selena, Luis Miguel, Cantinflas, Pedro Infante y Julio César Chávez, entre otras.

La rivalidad entre Telemundo y Univisión, ambos canales latinos de los Estados Unidos, también vivió algo similar en el 2016, cuando en un hecho histórico en Telemundo, en el inicio de Celia, la serie alcanzó un rating de 2,38 millones de televidentes y en ciudades como Miami y New York superó los cinco millones, dejando a su competidor prácticamente fuera de combate. Siguiendo con esta línea de entretenimiento, Telemundo lanzó a mediados del 2017 Mariposa de barrio, sobre la vida de la fallecida cantante mexicana Jenni Rivera (Univisión también emitió su serie de Jenni, pero sin éxito, por no contar con el apoyo de la familia de la artista). Mariposa de Barrio grabó más capítulos de los que pensaban y fue vendida a varios países, además de la plataforma Netflix.

En la historia reciente de las bio-series latinas, Caracol Televisión (Colombia) debe tener su “plato aparte”, con la creación de El Patrón del Mal, inspirada en la vida del narcotraficante Pablo Escobar. Esta serie se emitió con éxito en toda América, y en el caso de Argentina alcanzó picos de 8.2 puntos a pocos días de su extremo en Canal 9, en el verano del 2014.

En Argentina, al parecer los productores de televisión están siguiendo esta línea. Es así como el lunes de la semana pasada se estrenó con gran audiencia Sandro de América, la serie. Esta ficción nacional que cuenta con el apoyo de la viuda del artista, en su primera semana fue el tema de conversación en todas las redes sociales. En su estreno logró promediar 15,4 puntos de rating, convirtiéndose en ese momento en el programa más visto de lo que va del año, y terminó la semana con 16,4 puntos, otra hazaña para la televisión.

Con este pequeño, pero sustancioso pantallazo, sobre los números que pueden dar las series biográficas, con temas interesantes y vidas que atraen la atención del televidente, hay una luz de esperanza al final del túnel, para que el hijo pródigo regrese y se siente frente al viejo televisor.

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