Las pasas son uvas secas y deshidratadas, simplemente se dejan secar hasta que quede un fruto dulce y de color oscuro.
Ante todo, son una gran fuente de energía, porque contienen altas dosis de hidratos de carbono.
Por este motivo es muy recomendable su consumo en deportistas y personas que mantienen una intensa actividad. Al estar secas, el concentrado nutricional es mayor, ya que la uva ha perdido el agua y se han quedado los azúcares, que son los causantes del característico sabor de las pasas y su alto contenido energético.
Las pasas también ayudan a mejorar la circulación sanguínea y a evitar la formación de coágulos. o. Además, previenen la aparición de placas en las paredes del corazón, que poco a poco pueden ir minando su funcionamiento.
Las pasas son más que deliciosas y se pueden consumir solas o en diferentes postres y preparaciones. Son perfectas para disfrutar como refrigerio, en adición a los cereales, guisos, asados, rellenos, panes, bizcochos, ensaladas y arroces, e incluso en pollo y cerdo. La cocina vegana también las incluye mucho en sus preparaciones.
Otra forma de consumirlas es comiéndolas crudas, acompañadas con un vaso de té o con alguna de tus infusiones preferidas. También puedes optar por acompañar las uvas pasas con un yogur natural. Es tan sencillo como añadir el yogur a un bol e incorporar por encima un puñadito de uvas pasas. ¡Se convierte en un maravilloso desayuno!
