BARCELONA, España (AP) — Tras dos goleadas consecutivas, Zinedine Zidane sufrió el domingo su primer tropiezo al timón del Real Madrid, que empató 1-1 en cancha del Betis, y el Atlético de Madrid tampoco pudo derrotar al otro equipo de la capital de Andalucía, pues cedió otra igualada de local, 0-0 con el Sevilla, que le obligó a dejar el liderato de la liga española al Barcelona.
Los azulgranas, que ganaron el sábado por 2-1 en cancha del Málaga y recibirán al Atlético dentro de seis días, ocupan la punta con 48 puntos y tienen también un encuentro pendiente por la 16ta fecha contra el Sporting de Gijón. El equipo dirigido por el argentino Diego Simeone, en cambio, no logró resolver la visita sevillista por la 21ra fecha y se conformó con oficiar actualmente de escolta, con las mismas unidades que el Barsa pero peor diferencia de goles.
El Madrid, que niveló el gol de Alvaro Cejudo a los siete minutos gracias a la 17ma diana liguera de Karim Benzema (71), marcha tercero con 44 unidades.
«Estoy muy orgulloso. Merecimos mucho más, nos faltó suerte y perdimos dos puntos, pero vamos en buen camino», opinó Zidane, quien defendió el desempeño del colombiano James Rodríguez en un partido en que no pudo contar con Gareth Bale por lesión. «Le dije que se moviera también por dentro y eso hizo. Estoy muy contento con su actuación», aclaró.
Simeone, por su parte, evitó reconocer la candidatura al título del Atlético.
«Mantenemos la diferencia con un rival directo por el tercer puesto y el resultado es bueno», resumió el argentino.
Sevilla padeció la expulsión de Víctor Machín «Vitolo» a los 61 minutos pero sigue séptimo, ahora con los mismos 33 puntos que el Eibar, que perdió previamente el clásico vasco, 5-2 en cancha del Athletic de Bilbao.
El conjunto armero vio así rota su racha de cuatro victorias seguidas y menguado su colchón en la tabla respecto al Athletic, que cuenta 31 unidades en la octava posición y presenta dos puntos de ventaja sobre el Deportivo La Coruña, que igualó 1-1 de local con el Valencia, actual undécimo.
Betis inició el partido mucho más metido en faena que el Madrid, fulminado en una impetuosa volea desde el borde el área de Cejudo y que resultó inalcanzable para el costarricense Navas tras una primera atajada sobre Rubén Castro. El gol evidenció la falta de tensión visitante, pues el canterano Fabián Ruiz ganó una primera acción en banda a Pepe y luego una segunda en el área al central, quedando el balón suelto para la empalmada al rincón.
Pese al marcador adverso, el Madrid intentó controlar la escena mediante la posesión de la pelota, y empezó a contar ocasiones, aunque expuesto a los peligrosos contragolpes locales. Toni Kroos y Luka Modric manejaban la circulación con criterio, pero ni Isco Alarcón ni James lograban pisar con asiduidad el área verdiblanca.
Las oportunidades las monopolizó Cristiano Ronaldo, tan voluntarioso en su despliegue como desacertado ante el arco de su ex compañero Antonio Adán, al que perdonó la vida con un pésimo remate tras combinación con Benzema, antes de probar también desde lejos, fuera por poco.
James pifió un derechazo en el área chica, que acabó en parada de Adán sobre Benzema, y enganchó otra volea en tiro de esquina, bien blocada por el arquero; pero permaneció en la cancha lo justo para servir el empate a Benzema, tras pase filtrado por Kroos.
Betis reclamó posición irregular, e intentó sobrevivir a duras penas sostenido por Adán, quien sacó un último latigazo de James y lució reflejos en llegada con sello de gol de Benzema.
En un partido trabado, el Atlético recurrió al pase largo en busca de Antoine Griezmann o el argentino Luciano Vietto, aunque la ocasión más notable de la primera mitad la protagonizó por el Sevilla su compatriota Ever Banega, quien impactó el travesaño local en remate desviado por el rojiblanco Saúl Niguez.
La segunda parte arrancó con testarazo al poste de Griezmann y siguió con una diablura de Vietto, que derivó en infracción de «Vitolo» y segunda tarjeta amarilla para el volante andaluz.
A la expulsión del futbolista se añadió la de su entrenador, Unai Emery, por protestar, y siguió el toque de corneta del equipo de Simeone, que asedió el área del Sevilla y rozó el gol en jugada de estrategia definida por Yannick Carrasco y neutralizada en última instancia por el arquero Sergio Rico.
En busca del desequilibrio, Simeone dio entonces entrada a su compatriota Angel Correa y el colombiano Jackson Martínez, quien no gozó de ocasiones y alargó a tres meses su particular sequía goleadora. El argentino si intentó una aventura individual, pero se topó con Rico, igualmente firme ante un disparo potente de Gabi Fernández.
