Santiago.-El decano de la Facultad Arquitectura y Artes Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña (UNPHU, arquitecto Omar Rancier Valdez, declaró que el descuido de la inversión en los territorios rurales provoca que no haya oportunidad para el desarrollo humano, lo que obliga a sus habitantes a migrar a las ciudades para ubicarse en los lugares donde se concentran las riquezas.
El arquitecto manifestó que esas poblaciones se mueven en busca de mejoría de su calidad de vida. Dijo que el otro problema que existe es que se está ocupando áreas de terrenos fértiles, especialmente en el Cibao, para las construcciones urbanas. Observó que se trata de un grave problema en materia de alimentación.
Dijo que una mayor dimensión de la ciudad significa infraestructuras más caras. Indicó que el objetivo final de cualquier planificación urbana debe ser la de mejorar sustancialmente la calidad de la vida de sus habitantes. “Obviamente que así no se está contribuyendo a mejorar la calidad de vida”, declaró.
Rancier Valdez, quien es escritor, habló en el desarrollo del Curso Internacional sobre Gestión de Ciudades Sostenibles, organizado por el Ministerio de Administración Pública (MAP) y el Centro Latinoamericano de Administración para el Desarrollo (CLAD). Es coordinado por la Escuela Internacional de Administración y Políticas Públicas (EIAPP). Ésta es coordinada por Nelson De Freitos y el Curso es conducido por el experto español, Tomás Orbe Celaya. El mismo se desarrolla en el Hotel Gran Almirante.
En la actividad participan delegados de 17 países, entre ellos Argentina, Nicaragua, Cuba, El Salvador, Portugal, Venezuela, Panamá, Guatemala, Perú, Ecuador, Costa Rica y otros, según lo informado por el periodista Luís Céspedes Peña.
Explicó que las tres cuartas partes de los pobladores de América Latina residen en las áreas urbanas. Dijo que el principal problema es que las ciudades siguen creciendo de manera desordenadas y sin planificación. Indicó que la concentración de poblaciones humanas en las ciudades, de esas personas que abandonan el campo por falta de oportunidades, provoca gravísimos problemas en las ciudades, incluyendo la contaminación.
“Entonces, nosotros nos preguntamos: “ ¿Cuáles son los elementos que contribuyen en que nuestras ciudades se conviertan, cada vez más, en marchas urbanas que consumen territorios, que demandan todas las clases de servicios y que encarecen todo lo que son los procesos urbanos?”, advirtió el arquitecto Rancier Valdez. Dijo que hay varias razones.
“Una tiene que ver con esa visión de centralizar todas las gestiones en términos económicos y administrativos en los centros urbanos, lo que hace que todas esas gestiones de servicios se concentren en esos lugares, motivando las migraciones desde las zonas rurales a las urbanas, porque las personas buscan mejorar su calidad de vida”, agregó.
“Podemos decir que las comunidades fronterizas siguen decreciendo en poblaciones, especialmente jóvenes, porque éstos migran a la capital u otras ciudades en busca de mejoría de la calidad, presionados por la falta de oportunidades”, añadió el arquitecto Rancier Valdez.
Afirmó que en otra escala se tiene la migración de otras poblaciones a la Capital y muchos dominicanos que migran a Estados Unidos o Europa. ¿Cuál es el motivo de esas migraciones?, se preguntó Rancier Valdez. Y de inmediato se contestó: “buscar nuevas oportunidades para una mejor calidad de vida”.
Agregó que el problema no es básicamente la concentración de poblaciones, sino el consumo de territorios. Dijo que una ciudad que no se planifica, es colonizada de una manera anárquica. Precisó que esa anarquía se va a expresar en un consumo de territorio cada vez mayor y en muchas ocasiones las áreas terrenos son de muy alta calidad productiva.
Habló del aumento de la contaminación, la inseguridad y otros males provocados por el crecimiento sin planificación de las ciudades. Elso Segura Martínez, el analista Diómedes Batista y Alesandre Alvarez, funcionarios del MAP.
