La Asociación de Jueces Dominicana para la Democracia (Judemo) rechazó ayer la cancelación de dos magistrados de paz de la jurisdicción de Santiago. Tras oponerse a la decisión del Consejo del Poder Judicial por la destitución de los jueces Luisa Rosa García Polanco y Gabriel Marchena Adames, Judemo recordó que “vivir en Constitución implica acatar todos y cada uno de los valores y principios contenidos en ella, entre los cuales se encuentra el principio de independencia judicial”.
En este sentido, advirtió que del contenido de ambas decisiones se determina que los referidos jueces fueron juzgados, no sólo por el contenido de sus decisiones jurisdiccionales, sino que en cada caso la Fiscalía tuvo un papel estelar como acusador de dichos magistrados, lo cual abre la vía para que el Ministerio Público, en lugar de atacar las sentencias por los mecanismos recursivos que existen, lo haga en la persona de los jueces por la vía disciplinaria. Sobre ese mismo tema, la Fundación Institucionalidad y Justicia expresó su preocupación, pero al mismo tiempo dijo que siempre ha respaldado que los miembros de la magistratura se encuentren sujetos a un control disciplinario proactivo y riguroso, para asegurar que actúen apegados a los deberes inherentes a la función judicial.
Empero, la Finjus aclaró que ese control debe ser respetuoso y que de acuerdo al artículo 151 de la Constitución, “los jueces integrantes del Poder Judicial son independientes, imparciales, responsables e inamovibles y están sometidos a la Constitución y a las leyes”.
Además, refiere que los jueces no podrán ser removidos, suspendidos, trasladados o jubilados, sino por alguna de las causas establecidas y con las garantías previstas en la ley”.