Aunque las investigaciones no han terminado aun, familiares y el jefe de la Policía apresuraron resultados sobre la muerte de la doctora Soanny Montero.
José Armando Polanco Gómez, como policía investigador al fin, no quiso decirlo de forma franca y abierta, pero utilizó la siguiente expresión para despejar cualquier tipo de dudas con respecto a la misteriosa muerte de Soanny: “De todas formas, hemos lamentado muchísimo que ocurriera este evento, que esa joven tomara esa decisión tan triste”, dijo el jefe policial, aludiendo la posibilidad de que Soanny se quitó la vida.
Dijo que las posibilidades de que Soanny se suicidara o haya sido asesinada “son mínimas”.
Dijo que de todos modos le gustaría esperar que concluyan las investigaciones de este caso, que incluye la incorporación de los resultados finales de la autopsia realizada al cadáver de la joven doctora.
De hecho, ayer el director del Instituto Nacional de Patología Forense, Santo Jiménez, avanzó algunos datos relacionados con el estudio realizado al cadáver de la doctora para saber realmente de qué murió. El doctor Jiménez dijo que el cadáver de la mujer no presenta signos de violencia ni perforaciones.
Empero, dijo que esperará que el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) termine los exámenes de toxicología para entonces completar el informe final de esta muerte.
Versión familiar
Pero no solo el jefe de la Policía se adelantó al resultado final de las investigaciones. De forma sorpresiva y sin dar explicaciones del porqué de esta decisión, los padres de Soanny convocaron ayer a los medios para decir lo que realmente corresponde decir a las autoridades.
Mártires Montero, padre de la doctora fallecida, dijo que su hija sufría hipoglicemia y taquicardia, y que descuidaba el medicamento para contrarrestar los efectos de estas dolencias. Con esto, quiso decir que su hija murió como resultado de estas enfermedades; no asesinada o por suicidio, como se ha insinuado.
“Estas declaraciones no entorpecerán el trabajo que realizan las autoridades”, advirtió Montero.
El proceder de don Mártires violenta el protocolo establecido por los investigadores en materia criminal, de no apresurar juicios vinculados con la situación que se busca esclarecer.
Rumores
El mayor rumor sobre el deceso de la joven médico, es que se habría suicidado al saber que su pareja tenía otra mujer embarazada.
Pero nada de esto se ha podido comprobar científicamente, porque las investigaciones siguen su curso normal, no obstante la aparición y posterior sepultura del cadáver.
Ante la pregunta de por qué su hija estaba detrás del asiento, Montero contestó que “ella era doctora y pudo ser que intentara cambiarse de ropa para ir a algún campo, porque el que se va a suicidar no le pone el bastón a su carro ni una tapa al cristal”, especuló.
Los familiares presentaron documentos que señalan que la doctora hace un mes habría presentado síntomas de padecer dichas enfermedades.
Las declaraciones de Mártires fueron ofrecidas en su residencia, ubicada en el residencial Oasis, en el municipio Santo Dominto Este.