Por la imposibilidad de instalar plantas que generen un volumen de kilovatios que le permita presionar la baja del costo de la energía, el gobierno está obligado a pactar una renegociación de los contratos con los generadores de electricidad.Instalar dos o tres plantas con capacidad de generar 600 megavatios, que es un volumen que puede impactar en la oferta del mercado e incidir en los precios, dura cerca de cuatro años, que es el período gubernamental, y el tiempo que le resta de vigencia a los contratos con los generadores, agrupados en el llamado Acuerdo de Madrid.
Carente de una oferta nueva y de un volumen que pueda modificar la oferta eléctrica actual, el Gobierno estaría sin poder de disuasión frente a los generadores de electricidad, que son quienes controlan la oferta de electricidad producida en base a combustibles. Sólo la parte hidráulica, que es cerca del 16% de la oferta, es propiedad del Estado dominicano. El pacto eléctrico que plantea el Gobierno como uno de sus tres esquemas básicos de gestión, parece que será el escenario para lograr esa renegociación.
El presidente Danilo Medina dijo la semana pasada, en un discurso que pronunció ante el Consejo Económico y Social para presentar su propuesta de reforma fiscal, que el problema del sector eléctrico no se resuelve sólo con subir los cobros, bajar las pérdidas técnicas y disminuir el robo de electricidad. Y criticó al Fondo Monetario Internacional (FMI) porque los técnicos de ese organismo siempre han creído que el problema energético se resuelve cobrando más, bajando las pérdidas técnicas y disminuyendo los fraudes.
El mandatario expresó que el problema va más lejos porque “hay intereses en el sector que necesitan ser tratados”. Y enfatizó que no se puede seguir con ese modelo de negocio eléctrico y que el problema es estructural y que hay que abordarlo. El modelo que objeta el Presidente Medina está sustentado en el acuerdo de Madrid, una renegociación hecha en el año 2002 y que extendió hasta el 2016 varios contratos que vencían en el 2004.
Los problemas de los Acuerdos de Madrid están radicados esencialmente en la parte cambiaria y de precio del petróleo, porque cuando se firmaron el dólar estaba alrededor de 17 pesos por un dólar y el petróleo por debajo de US$40.
También incide el concepto del “mérito”, que establece que el orden de despacho de las plantas es según sus costos. Las más eficientes entran primero, pero si se necesita energía cara, el promedio sube, arrastrado por las unidades ineficientes.
El miércoles los senadores Félix Nova, Rafael Calderón, Dionisio Sánchez y Amable Aristy Castro pidieron al Gobierno revisar los contratos con los generadores.
Ayer, el procurador general adjunto para el Sistema Eléctrico (PGASE), Moisés Ferrer, se mostró de acuerdo con lo expresado por el presidente Danilo Medina de que se deben revisar los contratos de Madrid, firmados por Hipólito Mejía en el año 2002.
Ferrer estima que, sin lugar a dudas, esos acuerdos son lo que más daños han causado al sistema eléctrico nacional.
Sobre el tema, el vicepresidente ejecutivo de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE), Rubén Bichara Jiménez, dijo ayer que “la revisión de los contratos es una aspiración que, obviamente incluye un deseo nuestro, pero también es un derecho de quienes los tienen y son cosas en las que habrá que dialogar. Pero la aspiración de renegociación está presente en el ambiente por muchos años”.
Siempre se han hecho esfuerzos por negociar
El vicepresidente ejecutivo de la CDEEE, Rubén Bichara, afirmó ayer que “los esfuerzos” de renegociación siempre se han hecho y que hay ejemplos efectivos de lo que significa una revisión en los casos que se han hecho. También aclaró el objetivo de una reunión convocada para el próximo miércoles, organizada por los generadores. “El miércoles lo que hay es una reunión donde ha sido invitada la institución a hacer una presentación de las perspectivas y la situación actual del sector. Es una presentación de las que se hacen de forma rutinaria de diagnóstico y de perspectivas y hemos sido invitado como institución a una reunión que hay”, dijo Bichara. Hasta ahora eso es lo que se ha previsto.
“No es nada que hayamos organizado, convocado, nosotros ni el Gobierno tampoco, es una invitación en la que pensamos que vamos a participar”, indicó. Por otra parte, en un comunicado la CDEEE define los objetivos que buscará el Gobierno en el pacto eléctrico. Dice que parte de los temas que se pretenden resolver con el pacto son lograr mejores precios en la compra de energía, obtener inversión económica en parques de generación, disminuir las pérdidas, optimizar las cobranzas, mejorar la relación con los ayuntamientos y establecer una relación con los usuarios no regulados.