El diputado Rafael Abreu, del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), calificó ayer de “brillante e ilustre” al exdictador Rafael Leónidas Trujillo. Su planteamiento fue hecho durante la sesión en la que se debatió el proyecto de ley que regula la exportación de metales, chatarras y baterías de plomo.
“Como representante de la provincia del brillante e ilustre Trujillo”, fueron las palabras usadas por el congresista representante de San Cristóbal, para iniciar su turno sobre el tema.
Sus palabras provocaron un rápido, pero breve revuelo.
En el hemiciclo se escucharon las voces de quienes criticaban la defensa del tirano que gobernó República Dominicana, bajo un manto de miedo y sangre, durante treinta años. Pero también se escucharon las voces de legisladores y legisladoras que tomaron la alabanza a Trujillo Molina como un motivo de risa.
Pasado el alboroto, Abreu, orgulloso de sus declaraciones, defendió el derecho que tiene de reconocer al “ilustre” dictador.
Rafael Leónidas Trujillo Molina fue ajusticiado el 30 de mayo de 1961. Su figura es recordada como uno de los más oscuros capítulos de la historia de esta República. Quienes participaron de su ajusticiamiento aparecen como héroes nacionales.
