Un segundo teniente del Ejército Nacional mató a balazos en la madrugada de ayer a su mujer, una sargento de la misma institución. El oficial agresor fue identificado por la Policía como Germán Pina Ruiz. Se le acusa de matar a la mujer militar Nuris Rodalina Guzmán, de 37 años. Luego de matar a su concubina, Pina Ruiz huyó a un lugar desconocido, llevándose consigo a una niña de 18 días de nacida que había procreado con Guzmán.
Este nuevo feminicidio ocurrió en el barrio Enriquillo del sector Herrera. La mujer presenta un balazo en la cabeza.
Luego de matar a su mujer, agentes policiales interceptaron al oficial del Ejército, pero éste amenazó con dispararle a la criatura que llevaba en brazos, en caso de que intentaran apresarlo, y escapó con rumbo desconocido.
La Policía explica que cuando hicieron contacto con el oficial homicida “los agentes desconocían que el segundo teniente había asesinado a su concubina y madre de la recién nacida”.
Oficiales de la Dirección Central de Investigaciones Criminales (Dicrim) fueron responsabilizados para localizar y poner bajo arresto al militar que se dio a la fuga con una recién nacida a cuestas.
A las labores de búsqueda y captura del prófugo se han integrado varios agentes del orden y personal de inteligencia del Ejército Nacional, quienes rastrean diferentes zonas, explicó el cuerpo del orden público.
Por otra parte, en Sabana Perdida, un hombre mató al vigilante privado Manuel Emilio de Jesús e hirió a dos hijos de su exmujer, a quien buscaba para matarla.
El agresor es el señor Jarur Cerrano Báez, quien al no poder asesinar a su exmujer hirió a tiros a Jonhatan de la Cruz Castillo, de 23 años, y a su hermana Yuli, de 15. Ambos son hijos de María Francisca Castillo, de 42.
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Luego de esta acción, Cerrano Báez fue perseguido, herido y apresado por una patrulla policial. El arma que utilizó fue una escopeta Mossberg, calibre 12, número K977414, que despojó al vigilante que mató.
