A pesar de que la tendencia en los últimos años ha sido un aumento en los casos de adopciones y que más niños y niñas están siendo adoptados por familias dominicanas, en el país hay miles de infantes huérfanos y en situación de riesgo social que por diversas razones no llegan a ser adoptados.
A esos niños y niñas, el Estado está obligado a asistirlos y protegerlos para garantizar su desarrollo integral y el ejercicio pleno de sus derechos fundamentales.
El órgano encargado de realizar esa tarea es el Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (Conani), el cual tiene bajo su supervisión unas 350 Organizaciones No Gubernamentales (ONG), que acogen a una gran parte de estos niños para proporcionarles, atendiendo a sus necesidades sociales, salud física y emocional, y una mejor vida basada en un modelo familiar.
Aldeas SOS
Entre esas ONG se encuentran la Asociación de Aldeas Infantiles SOS República Dominicana, fundada por la Comisión de Kinderdorf Internacional, radicada en Innsbruck-Austria. Es una organización sin fines de lucro que acoge a niños en situación de orfandad o que por razones de pobreza, de salud o sicológicas, sus padres no pueden cuidarlos, remplazando a la familia natural del huérfano o abandonado, por una familia que le brinda seguridad alimenticia, educación, techo y los servicios de salud que amerite cada caso en particular.
Aldeas SOS tiene presencia en 132 países del mundo y en República Dominicana desde hace 32 años funcionan tres: en Los Jardines del Norte, en el Distrito Nacional; Los Minas, en Santo Domingo Este, y Los Cocos de Jacagua, en Santiago.
Según explica Jenry Farfán, asesor de mercadeo y comunicación de la Oficina de Coordinación Nacional de Aldeas SOS, en total estos hogares acogen a 1,200 niños y adolescentes, y a la fecha hay registrados 650 aldeanos egresados.
Farfán afirma que la mayoría de ellos son entes productivos y exitosos que han devuelto a la sociedad, y a las propias aldeas, algo de lo que recibieron durante su desarrollo. “Entre esos egresados tenemos médicos, contables, periodistas, ingenieros, profesores y empresarios”, asegura.
Egreso de las Aldeas
Cuando los aldeanos están en la edad de 15 a 16 años egresan de las Aldeas hacia las residencias de jóvenes, que son hogares donde continúan su formación técnica-profesional.
A nivel nacional existen seis y allí tienen la oportunidad de vivir experiencias que los ayudarán a desarrollar su personalidad y prepararse para su vida independiente, asegura Farfán.
En las Aldeas se manejan dos modalidades de atención a la niñez: familias SOS, que crea familias sustitutas para los niños que no tienen, y familias de origen que trabaja en comunidades vulnerables a la desprotección para prevenir el abandono, a través de nueve centros comunitarios en los que apoyan a las familias biológicas con el cuidado y educación de sus hijos.
Madres SOS
Cada familia SOS cuenta con una madre que tiene bajo su cuidado de 8 a 12 niños en una misma casa. Farfán explica que el perfil de una madre SOS es que sean señoras con deseo maternal, viudas, que no tengan hijos o que si los tiene que ya sean grandes. Estas mujeres son capacitadas y entrenadas por tres años y por cuidar de sus hijos reciben un incentivo de ocho a 12 mil pesos dependiendo del tiempo que tengan en su labor.
Farfán manifiesta que las Aldeas SOS, en este país, han pasado por grandes dificultades para la manutención de esos niños porque no reciben apoyo fijo del Estado. Este año los aldeanos solo fueron favorecidos con 120 mochilas por parte del Gobierno.
Recepción de niños
En estos hogares acogen a menores de cero a nueve años con buen estado de salud física y mental, que han perdido a sus progenitores o a uno de ellos, o que han sido abandonados. Estos niños llegan por diferentes vías: desde el Conani, por las escuelas, iglesias y familias afectadas.
Recursos económicos
Jenry Farfán
Asesor de mercadeo y comunicación
“El 65 por ciento proviene de Kinderdorf Internacional, pero el 35 por ciento restante, hay que buscarlo aquí y a pesar de que recibimos aportes de algunas empresas, instituciones y personas, no es suficiente, porque el costo anual de manutención de un niño es muy alto”. El presupuesto de Aldeas SOS RD para este año es de 87 millones de pesos.