En el Partido Revolucionario Dominicano (PRD) está en debate si un expresidente por haber sido candidato presidencial pasa a ser el líder de la oposición o si ese liderazgo reside en la autoridad institucional de la organización.
Historia
En 50 años tres expresidentes se han convertido en líderes de la oposición: Juan Bosch, Joaquín Balaguer y Leonel Fernández. Bosch simbolizó contra Balaguer la oposición moral. Volviendo al poder Balaguer y Fernández. Las cinco razones capitales para ser líder de oposición y regresar al poder fueron: 1. Tener un partido fuerte, aglutinado a su alrededor; 2. Varios partidos aliados; 3. Grandes habilidades personales; 4. Se veían candidatos presidenciales; 5. El misterio de que malos gobiernos les sucedieron.
El futuro político de otros tres expresidentes ha sido nefasto: Antonio Guzmán se suicidó. Jorge Blanco se apagó con un juicio anticorrupción. Hipólito Mejía fue candidato presidencial, pero por sus errores recibió dos derrotas seguidas, perdió las elecciones y no pudo quitar a Miguel Vargas de la presidencia.
Lo psicológico o golpe de estado institucional
El expresidente Mejía buscando un padre a su derrota electoral para esconder sus errores por los cuales perdió las elecciones y azuzado por sus jefes, pretendió quitar por una reunión de la Comisión Política al presidente Miguel Vargas, suspendiendo y expulsando a otros dirigentes del PRD. Mejía, en el 1999, al ganar la candidatura presidencial del PRD, quitó de la presidencia a Enmanuel Esquea Guerrero y puso a Hatuey De Camps, a quien destituyó en el 2003 para ser candidato presidencial releccionista en el 2004.
Hipólito pierde el pleito legal
Miguel Vargas y sus seguidores apoderaron al Tribunal Superior Electoral que falló restableciendo a Miguel Vargas como presidente y desconociendo la autoridad de los miembros de la Comisión Política que aprobaron las suspensiones y expulsiones de dirigentes. Y declaró nulas dos resoluciones por considerarlas violatorias del artículo 69 de la Carta Magna, que consagra como garantías a los derechos fundamentales la tutela judicial efectiva y el debido proceso. El grupo de Mejía ha desacatado las sentencias, planteado irse a las calles, un “galloloquismo”, que lo llevará a perder el apoyo del pueblo.
El pleito político
El presidente Mejía sólo es líder de una facción del PRD. No hay seguridad de que los jefes del PPH quieran reconstruir el partido alrededor de Mejía. Sus aliados están más interesados en sus poderes o sus propios futuros políticos que el del líder, comprobado en la ausencia a las reuniones y no hablando del tema. Otra debilidad es que los halcones del PRD no ven a Mejía como candidato presidencial del 2016, pero quieren que saque a Miguel, porque ellos le temen.
Mejía quería ser el líder del PRD y convertir el fragmentado partido en una maquinaria que dirija la oposición. Lo que abortó al perder el pleito legal en contra de Miguel Vargas. Al presidente Mejía y el PPH le falló su primera estrategia. Un líder político y un grupo con vocación de poder debieron tantear la acción fracasada. Los nuevos amigos del PPH para jugársela por su líder, han exigido apoyo y recursos en su provecho.
En dos ocasiones el presidente Mejía invirtió grandes recursos del gobierno con el objetivo de tener provecho político, como fue en las elecciones congresuales del 2002 para subir los senadores de 24 a 29 y en el 2003 para pasar la reeleción presidencial en el congreso. Lo contrario ha sido la tacañería.
Miguel Vargas no puede repetir sus errores
El PPH no logró apropiarse del PRD, la lucha pasa al debate político, para concluir al escogerse los puestos de mandos del PRD en casi dos años. Miguel Vargas para crecer no puede repetir los cuatro errores esenciales, que lo excluyeron de ser el presidente del país: 1. El Pacto de las Corbatas Azules con el presidente Fernández, que rehabilitó a Hipólito Mejía, cuando debía aplastar por completo con un párrafo provisional que no podía aspirar en el 2012. 2. En la convención del 27/09/2009 asumió una posición parcial a favor de Orlando Jorge Mera y Geanilda Vázquez en contra de Guido Gómez y Tony Peña.
Confiado en los amigos que abandonan. 3. En la convención del 29/11/2009 para elegir los candidatos a cargos electivos para las elecciones congresuales y municipales del 2010 se reservó un 15% de candidaturas para las alianzas, un 30% de las candidaturas a senador, síndico y diputado, un 50% de los regidores, directores de distritos y vocales. Medidas muy odiosas para los perredeístas. 4. En las primarias 6/03/2011 optó por un padrón electoral abierto, aceptando Hipólito el apoyo del gobierno para ganar con votos peledeístas en el PRD.
Finalmente, el líder de la oposición es Miguel Vargas por representar al PRD institucional y mayoritario, en capacidad de ser el candidato presidencial del 2016.