Primero que cualquier valladar externo, llámense condiciones sociales o económicas desfavorables, discriminación, o cualquier otra limitación circunstancial objetiva, las personas están compelidas a vencer despiadados enemigos internos: miedo, falta de confianza, apego al pasado, culpa, pues son los más peligrosos conspiradores contra nuestros sueños y realizaciones. Por eso, numerosos tratadistas espirituales y especialistas conductuales llaman a hacer consciencia del poder del pensamiento en nuestras vidas. Evitar dejarnos influenciar por aquellos que nos colocan auto etiquetas negativas: “No puedo”; “Soy incapaz”; “Y si fallo”, etc. Son de naturaleza involuntaria; a veces secuela de padecimientos mentales o físicos ocultos. La fe, el apoyo espiritual o psicológico, el auto conocimiento, son los recursos que permiten contrarrestarlos y liberarnos.
Enemigos (2)
Primero que cualquier valladar externo, llámense condiciones sociales o económicas desfavorables, discriminación, o cualquier otra limitación circunstancial objetiva, las personas están compelidas a vencer despiadados enemigos internos: miedo,…