Las autoridades debieran asegurarse de su capacidad para hacer cumplir las ordenanzas, apuntalan más desorden si no las respaldan de efectivos mecanismos de coacción. La prohibición de venta de bebidas alcohólicas en Viernes Santo aportó otro ejemplo de esa debilidad, pues fue evidente que muchos negocios la desacataron y se mantuvieron vendiéndolas sin rubor. Lo palpé en la renombrada comunidad del Este donde pasé el reciente asueto. Salvo grandes establecimientos, los cuales acogieron y respetaron la medida, en ciertos restaurantes, bares y otros pequeños negocios, prácticamente “ni se enteraron”, en medio de la ausencia de autoridad para garantizar cumplimiento. Si no se puede hacer cumplir las normas, mejor ahorrárselas y evitarle al Estado escarnios que lo desacreditan.
Burla
Las autoridades debieran asegurarse de su capacidad para hacer cumplir las ordenanzas, apuntalan más desorden si no las respaldan de efectivos mecanismos de coacción. La prohibición de venta de bebidas alcohólicas en Viernes Santo aportó otro…