Yeni González, otra madre guatemalteca, recibió la custodia de sus tres hijos, de 6, 9 y 11 años. Dijo que se sentía feliz.
Le agradeció a los funcionarios electos, a su abogado, y a voluntarios que pagaron su fianza a través de una recaudación de fondos y la llevaron a Nueva York en automóvil desde el Centro de Detención Eloy.
Envió un mensaje a las madres que aún están detenidas cerca de la frontera con México: “Luchen, porque con toda la ayuda de estas personas lo van a lograr, y con la ayuda de Dios”.
Julie Schwietert Collazo fue una de las que ayudó. Organizó la caravana que llevó a González a Nueva York después de que su grupo de voluntarios pagó la fianza de 7.500 dólares para que González fuera puesta en libertad. Recaudaron casi 200.000 dólares y hasta ahora han pagado las fianzas de seis mujeres para que las liberaran de esa instalación en Arizona, y se espera que tres más sean puestas en libertad.
Al preguntársele si tenía algo que decirle al presidente Donald Trump, González sólo negó con la cabeza.
Una madre hondureña también salió el viernes de Cayuga en silencio junto con sus dos hijos, uno de los cuales traía un gran oso de peluche y sonreía.