Santiago. A pesar de las lluvias y el mejoramientos de los niveles del embalse Tavera-Bao, la escasez de agua se acentúa en algunas comunidades de Santiago.
En el día de ayer el nivel del embalse se colocó en 324.74 metros sobre el nivel del mar en tanto, que el nivel de entrada era de 53.69 metros cúbicos por segundo y la salida es de 57.74.
En barrios como el ensanche Libertad el agua llega ocasionalmente y para abastecerse, sus moradores deben hacerlo en una tubería improvisada en un pequeño parque.
“Ahora en las mañanas empieza a llegar, pero luego se va. Quienes podemos almacenar el agua en galones, lo hacemos con una toma compartida”, expresó Carlos Manuel Rojas, estudiante de Comunicación Social de la Universidad Autónoma de Santo Domingo.
Rojas dijo que a pesar de no brindar el servicio, la Corporación de Acueducto y Alcantarillado de Santiago (Coraasan) pretende obligarlos a pagar el precario servicio, como si lo recibieran con regularidad.
Adalgisa Pichardo, otra de las afectadas por la escasez de agua, dijo que diariamente deben levantarse temprano para almacenar el líquido.
También en residenciales como El Dorado I y Los Llanos de Gurabo, los residentes se quejan por la escasez y dicen que además de pagar el servicio deben destinar recursos a la compra de camiones para llenar las cisternas.
En los programas interactivos, las quejas llueven de parte de los usuarios contra el precario servicio que ofrece la entidad acuífera.
En varias ocasiones, la Coraasan ha dicho que tan pronto concluyan con el acueducto de Cienfuegos, que beneficiará a prácticamente 300 mil personas, y los trabajos que realizan en Gurabo, empezará a notarse la mejoría. También trabajan en la colocación de tuberías en la zona sur.
Contrario a esos barrios, en Villa Olímpica, que enfrentaron por mucho tiempo dificultades, ahora el líquido llega casi a diario.
