Santiago. La Sociedad Ecológica del Cibao y la Unión de Juntas de Vecinos y Organizaciones Comunitarias de Gurabo y Guazumal demandaron el cierre definitivo del vertedero de Tamboril.
Asimismo, rechazaron la firma de un contrato otorgado por los ediles y la alcaldía de Tamboril por un período de 30 años a una empresa denominada Glota, para supuestamente instalar en el basurero una procesadora de residuos sólidos para producir energía. La empresa, que presuntamente es de capital brasileño, es propiedad de Félix Rosa López ligado al negocio de autos.
Belkis García, presidenta de la Sociedad Ecológica del Cibao, criticó que pasaran ya tres semanas de vencimiento del plazo de los 90 días acordado para el cierre por el ministro de Medio Ambiente, Francisco Domínguez Brito, y el alcalde de Tamboril, Anyolino Germosén, pero el vertedero aún sigue operando.
Tanto los ecologistas como los integrantes de las juntas de vecinos reclaman cumplir con el cierre técnico del basurero de Guazumal y en su lugar piden levantar un parque ecológico.
Yanqui Uceta y Elías Cruz, voceros de la Unión de Juntas de Vecinos, califican de arbitrario y descabellado el contrato firmado el pasado día seis de febrero con la empresa Glota, cuando lo que se debería estar discutiendo es la clausura del vertedero que afecta la salud de cientos de familias de la parte norte de la ciudad.
Los comunitarios pidieron que se actúe con transparencia con la propuesta de la compañía, debido a que se pretende otorgar un contrato que dicen lo único que busca es extender las operaciones del vertedero. A cambio, según revelaron los denunciantes, estos prometieron la compra de seis camiones compactadores para la alcaldía de Tamboril.
El cierre del vertedero a cielo abierto que opera en la comunidad de Guazumal es demandado, además, por organizaciones empresariales, así como por representantes de los sectores educativo, religioso, profesionales, el Consejo Ecológico, el Patronato de la Policía Nacional y el Centro de Formación y Acción Social y Agraria.
