Intelectuales de Europa y América debatieron ayer acerca del contexto de la integración latinoamericana, haciendo especial énfasis en los factores que están afectando los procesos de integración y la realidad de la República Bolivariana de Venezuela.
Durante la primera jornada del Seminario Internacional Realidades, Paradigmas y Desafíos de la Integración, que organiza el Ministerio para Políticas de Integración Regional de República Dominicana y que se extenderá hasta hoy, participaron el analista,Ignacio Ramonet; el catedrático argentino Atilio Borón; el sociólogo brasileño Frei Betto y el filósofo venezolano Miguel Pérez Pirela.
Ramonet, quien se desempeña como director de Le Monde Diplamatique en Francia, dijo que actualmente existen al menos cuatro aspectos a considerar para entender la compleja realidad de la geopolítica del siglo XXI.
Indicó que se está registrando el declive de Occidente, lo que indica que por primera vez no existe la perspectiva de que Estados Unidos de América siga liderando el mundo, debido al surgimiento de nuevos polos de poderío como China, Rusia e India.
Ramonet reconoció que Estados Unidos de América sigue siendo la primera potencia económica y militar del mundo, pero advirtió que irá perdiendo protagonismo de forma progresiva durante los próximos años. “Occidente representa actualmente el 56% de la economía del mundo, pero para en el año 2030, sólo representará el 25%”, dijo.
El intelectual resaltó, además, que la dinámica global de la multipolaridad, promoverá el surgimiento de potencias regionales como Indonesia, Brasil, Irán, Vietnam, Turquía, Nigeria y Etiopía, entre otros y argumentó que China continuará emergiendo como una gran potencia y que para preservar su lugar, seguirá aplicando junto a Estados Unidos lo que denominó como una “desconfianza estratégica”.
Otro de los factores que presentó Ramonet, como característicos de la realidad global, es la inestabilidad económica generada por el capitalismo y por la globalización, lo cual ha impedido que surjan soluciones que permitan resolver problemas generales y ha hecho que el capitalismo sufra mutaciones.
Dijo que Internet ha jugado un rol protagónico en aspectos como el comercio, la economía, cultura, educación y la comunicación y que esto ha profundizado la digitalización de la sociedad.
Estados Unidos impide integración
Frente a esto, el investigador argentino Atilio Borón mencionó que el principal problema para la integración de la región es la política norteamericana sustentada en la doctrina Monroe, considerada como la primera doctrina de su política exterior y como un “instrumento para sabotear cualquier intento de integración en Latinoamérica”.
Agregó que es falso que Norteamérica no vea a Latinoamérica y el Caribe como espacios de una gran importancia estratégica, “por el contrario, son las zonas más importantes para su política internacional, el caso es que cuando se refieren a nosotros, lo hacen como parte de su política doméstica”, dijo.
Borón recordó que Estados Unidos de América, en su afán de impedir la integración, se opuso a la creación de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y ha apelado a la desestabilización de gobiernos para tratar de acabar con el disenso. “Frente a esto, el único camino que nos queda es la integración”, expresó.
Gobiernos progresistas deben reflexionar
Para el intelectual brasileño Frei Betto, quien se define como un hombre de izquierda por fe, los gobiernos progresistas no se han asegurado la gobernabilidad desde los movimientos sociales, sino desde las cúpulas y esto ha influido en los procesos de integración. “No hemos hecho la alfabetización política y la organización de los pueblos y hemos priorizado el acceso a bienes materiales y no a bienes sociales”, cuestionó. Resaltó que la izquierda no puede perder la moral y la ética de la acción política, ni dejarse contaminar.
Venezuela amenazada por la antiintegración
Finalmente, el filósofo venezolano Miguel Pérez Pirela, se refirió a la amenaza que se cierne sobre Venezuela por su papel protagónico en la integración latinoamericana y caribeña y especificó que factores imperiales y hegemónicos han tratando de promover la antiintegración. Pirela se preguntó si la integración pasó de moda o si los pueblos se aburrieron de ella y resaltó que Estados Unidos sigue empeñado en utilizar estructuras como la SIP, la USAID y la NED para torpedear los procesos de integración.
