La creación del Instituto Dominicano del Café (Indocafé) fue una respuesta legislativa ante los fracasos de los “incesantes” esfuerzos del Estado por reactivar la producción cafetalera nacional y mejorar la vida de los productores del campo.
Los esfuerzos no surtieron los resultados esperados debido a la falta de “articulación e implementación de políticas que aúnen, desarrollen y fortalezcan el sector cafetalero nacional”, dice la recién aprobada ley que crea el Indocafé, en uno de sus considerandos.
La propuesta emanada del Poder Ejecutivo, y que el Congreso convirtió en ley tiene como argumento primario que la República Dominicana cuenta con las condiciones climáticas y medioambientales apropiadas para la producción de café, que le permiten mantener niveles de productividad, calidad y rentabilidad competitiva, y que constituyen una de las áreas agroforestales más amplias y mejor distribuidas en el territorio nacional”.
Los argumentos
La ley argumenta que a pesar de que existen condiciones favorables, la producción cafetalera se ha visto afectada en las últimas décadas debido a políticas económicas como el recargo cambiario en la década de los años 80, y la afectación a nivel nacional de enfermedades y plagas como la roya y la broca, hechos que disminuyeron sustancialmente la producción nacional y desestimularon a los productores por falta de rentabilidad.
Resalta que en ese contexto y con la finalidad de impulsar el desarrollo de la producción cafetalera dominicana fue creado el Consejo Dominicano del Café, ratificado mediante la ley 79-00, del 25 de septiembre de 2000, como institución especializada en el diseño y planificación de la política cafetalera nacional.
El cuarto considerando de la ley que crea el Indocafé indica que en un esfuerzo por revertir la situación creada a raíz del deterioro progresivo de las plantaciones de café, en el año 2001, con la participación del Consejo Dominicano del Café y el Banco Agrícola de la República Dominicana se suscribió una convención de apertura de crédito con la Agencia Francesa de Desarrollo (FDA), para la creación de un programa dirigido al mejoramiento de la calidad del café dominicano y promoción de los cafés especiales. Esa convención estableció un fondo ascendente a US$17.0 millones cuya ejecución se inició en el año 2004, incluyendo una línea de financiamiento para mantenimiento, rehabilitación y fomento del café.
El instituto fomentará y facilitará la caficultura
El Indocafé tendrá las funciones de fomentar y facilitar la siembra de café en todo el país, asesorar en materia de créditos agrícolas a los pequeños, medianos y grandes productores de café, promover cursos de capacitación y asesoramiento técnico para eficientizar y desarrollar la producción cafetalera nacional, y velar porque la producción y exportación del café clasificado como orgánico responda a los registros y estándares correspondientes.
