La comisión dice que casi 60 conductores de Uber en Colorado pudieron trabajar en el último año y medio pese a tener antecedentes con condenas por delitos graves. Aparte del exconvicto que escapó de la cárcel, otros choferes tenían antecedentes por delitos vehiculares graves y problemas con sus licencias de conducir.
La semana pasada, dos mujeres que dijeron haber sido atacadas sexualmente por choferes de Uber presentaron demandas federales en San Francisco, acusando a la empresa de no tener un proceso deficiente de revisión de antecedentes.
Uber no contestó de inmediato a un mensaje que se le dejó en busca de comentarios.