La discusión en abstracto sobre el mejor mecanismo de selección de candidaturas para cargos de elección popular carece de sentido. El modelo ideal no existe, pues este tiene que responder a un contexto político determinado. El mejor mecanismo para escoger candidatos es aquel que contribuya a fortalecer el sistema de partidos y a garantizar los derechos políticos de los militantes y las expectativas de los electores. Este ha sido un tema central en el debate sobre la ley de partidos. Un punto de avance lo constituye el consenso sobre la necesidad de institucionalizar el mecanismo de las primarias, como una forma de afianzar la democracia interna de los partidos dominicanos.

La diferencia ha estado en cuál es el tipo de primarias que más conviene. Lo idóneo sería promover una forma de selección de candidatos que resuelva los problemas presentados en las primarias realizadas hasta ahora y que han erosionado la confianza ciudadana en las organizaciones políticas. Un primer problema ha sido el alto nivel de conflictividad, violencia y división interna que han experimentado las principales fuerzas políticas a partir de sus procesos internos. Esto evidencia que los partidos no están en condiciones de organizar sus elecciones internas por sí solos. En tal sentido, convendría que la organización de las primarias esté a cargo de la JCE.

Por otro lado, las elecciones internas de los partidos han sido muy cuestionadas, debido a las denuncias de injerencias de partidos adversos. Para evitar esto, sería propicio realizar primarias de manera simultánea, para que los militantes y simpatizante de cada partido se concentren en la elección de los candidatos de su preferencia. Una tercera dificultad tiene que ver con la poca calidad de los padrones electorales de las organizaciones políticas. Ningún partido cuenta con un registro de miembros depurado que evite que una misma persona esté inscrita en más de una fuerza política. Ir a procesos internos con este tipo de padrón se constituye en una fuente de conflictos. Por lo tanto, es acertada la propuesta de primarias organizadas con el padrón general de electores.

Las primarias simultáneas y con padrón abierto, obligatorias para los partidos más grandes del sistema, pueden que no sean el mecanismo ideal, pero si el más conveniente para resolver los diversos y serios problemas generados por las primarias realizadas hasta ahora. Lo importante es preservar el sistema de partidos y fortalecer la democracia electoral, no importa el costo económico que esto implique. Ojalá que la comisión bicameral del Congreso tome en cuenta estos aspectos y apruebe el tipo de primarias que más convenga al país.

Posted in Opiniones

Más de opiniones

Más leídas de opiniones

Las Más leídas