Las naciones del mundo intentan mantener el Acuerdo de París (2015), que busca evitar que la temperatura global se eleve a más de 1.5º C de los niveles preindustriales. Esto en base a un fondo común de US$100,000 millones, pautado para el 2020. Deben aportarlos los países más ricos a favor de los más pobres y vulnerables, cual nuestro país. Pero hasta ahora se habían reunido sólo 500 millones.
Mientras, el nuevo titular de la Agencia para Protección Ambiental de Estados Unidos, Scott Pritt, es un escéptico del cambio climático y defensor de los combustibles fósiles. Hay razón para pesimismo. Hagamos votos por que no se dé al traste con las metas del Tratado y que a lo sumo se atrasen. l