WASHINGTON (AP) — Pese a la lluvia y el frío, miles de manifestantes abarcaron el sábado varias cuadras de Washington durante su marcha por el Día de Martin Luther King Jr., que por momentos también se convirtió en una protesta contra el presidente electo Donald Trump.
El reverendo Al Sharpton, líder en pro de los derechos civiles, organizó la protesta “We Shall Not Be Moved” (“No nos moverán”) previa al feriado del lunes en honor de Martin Luther King Jr. Pero en la mente de los manifestantes también estuvo presente Trump, quien será investido en menos de una semana.
Con paraguas y resistiendo temperaturas cercanas a 0 grados Celsius (32 Fahrenheit), la multitud coreaba “¡No hay justicia, no hay paz!” y “¡No nos moverán!”, así como “No seremos vencidos” y “El amor vence al odio”, valiéndose de un juego de palabras con el apellido del presidente electo.
Vitorearon cuando uno de los oradores hizo referencia a los comentarios del representante John Lewis de Georgia, quien dijo que no asistirá a la toma de posesión de Trump y, en una entrevista con el programa “Meet the Press” de la NBC, recalcó que no considera que el magnate sea un “presidente legítimo”.
“No venimos a hacerle una petición a Donald Trump, porque ya dejó en claro cuáles son sus políticas y sus nominados. Venimos a decirles a los demócratas en el Senado y la Cámara de Representantes y a los republicanos moderados que ‘Tengan valor. Que tengan agallas’. No los enviamos acá para que se les doblen las rodillas”, dijo Sharpton a los asistentes a un evento luego de que caminaron desde el monumento a Washington hasta un parque cercano al monumento a Martin Luther King Jr.
Sharpton pidió a los manifestantes que mostraran su oposición al nominado por Trump para secretario de Justicia, el senador Jeff Sessions de Alabama, y le preguntó a la multitud si estaba dispuesta a acudir a las oficinas de sus senadores para oponerse a la designación.
“Necesitamos hacer algunas visitas. Necesitamos quedarnos un rato más”, les dijo a los asistentes. Posteriormente declaró a The Associated Press que esas visitas, que incluyen a varios grupos, comenzarán dentro de los próximos 10 días.
El sábado también se reunieron manifestantes para apoyar los derechos de los inmigrantes en eventos organizados en todo Estados Unidos, incluido Washington, para denunciar el discurso antimigratorio de Trump, así como sus promesas de levantar un muro en la frontera con México y prohibir el ingreso de musulmanes al país.
La muchedumbre en Washington exhortó a Trump y al Congreso controlado por los republicanos a que mantengan vigente el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia, el cual evita la deportación de las personas que ingresaron sin permiso a Estados Unidos cuando eran menores de edad.
Junto a Sharpton aparecieron familiares de Eric Garner, Trayvon Martin y Walter Scott, hombres negros cuyos nombres se han convertido en gritos de batalla luego de que murieron.
“Tenemos trabajo por hacer una vez que nos vayamos de aquí”, dijo Gwen Carr, la madre de Garner, quien falleció en 2014 en Staten Island, Nueva York, después de que un policía blanco lo asfixiara mientras intentaba someterlo.