La República Dominicana ocupa el último lugar en el ranking de 72 países que participaron el año pasado en la evaluación internacional de rendimiento escolar, conocida como pruebas PISA, que mide las competencias de lectura, ciencias y matemáticas de los estudiantes de Media.
Para el Ministerio de Educación, el desempeño de los 4,935 estudiantes de 196 centros educativos, seleccionados para participar por primera vez, en el Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA, por sus siglas en inglés), que auspicia la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), pone en evidencia las debilidades del sistema educativo nacional, las cuales serán resueltas con la política educativa del Gobierno.
En ese sentido, el ministro de Educación, Andrés Navarro, anunció que su gestión centrará las inversiones en la formación de los docentes, en la correcta aplicación del nuevo currículo por competencias y la mejoría de la gestión de los centros educativos.
“Esos tres pilares: formación de los profesores, aplicación rigurosa del nuevo currículo basado en competencias, y mejora sustantiva en la gestión de las escuelas, van a ser la garantía de que dentro de tres años se comiencen a experimentar mejoras en los indicadores de evaluación”.
Anunció que próximamente la institución de desligará completamente de la construcción de escuelas, traspasando esta responsabilidad al Ministerio de Obras Públicas, para centrarse en la mejoría de los procesos enseñanza-aprendizaje.
Dijo que el país tomó la decisión de involucrarse en esta evaluación educativa internacional con la intención de “sincerarnos”, y conocer las condiciones en las que parte la reforma educativa que impulsa el Gobierno, y con ello iniciar un proceso de mejora de la calidad educativa, poniendo énfasis en los renglones más débiles, como las matemáticas.
En ese sentido, anunció que el equipo técnico del Ministerio revisará de manera pormenorizada estos resultados, para elaborar un informe nacional, que permita preparar los planes de mejora.
Recordó que las pruebas PISA hacen énfasis en competencias, lo que va en consonancia con el nuevo currículo que comenzó a aplicarse en el país desde el año pasado, lo que indica que hemos emprendido un camino certero al sustituir un currículo basado en conocimientos por uno basado en competencias.
Dijo que al ser la primera vez que el país participa en las pruebas, será dentro de tres años, cuando podrán evaluarse los niveles de mejoras experimentadas.
“De esa forma, estaremos aplicando una política de educación sobre la base de evidencias y no de supuestos, que es un aspecto fundamental de la nueva gestión.
Nosotros vamos a profundizar los estudios, las investigaciones, en la situación de los aprendizajes, en procura de verificar dónde están las fallas y enmendarlas”, aseguró.
Inversión educativa ha sido correcta
El funcionario dijo que todavía no se puede hablar de que la inversión del 4% del PIB ha tenido un impacto positivo o negativo en la calidad de la educación, pues los cambios en este ámbito son de mediano y largo plazo, tras recordar que fue en el 2014 cuando se firmó el Pacto Educativo y la prueba se aplicó en 2015.
“La inversión que se ha estado haciendo en la calidad educativa es correcta y válida. Se han sentado las bases para que el país pueda emprender estas mejoras en las competencias de aprendizajes y hay indicadores que hablan de la condición necesaria, el ambiente necesario para los aprendizajes, como es la jornada escolar extendida en educación, que crea condiciones para que puedan aprender con el nuevo currículo, nuevos métodos y la tecnología que se va incorporar, y con esto ir creando las bases para cambiar esta realidad que hoy nos expresa PISA”, dijo Navarro.
Educa: resultados eran previsibles
Acción Empresarial por la Educación (Educa) afirmó ayer que los resultados de las pruebas eran previsibles, pues los estudiantes evaluados, ingresaron al sistema educativo en 2005, “en el mejor de los casos, 8 años antes que llegaran los recursos equivalentes al 4% del PIB a la educación dominicana”.
De acuerdo a Educa, las pruebas regionales aplicadas por la Unesco en 2008 y 2013 ya ubicaban al país en la zona de menor desempeño de la región.
Puso como ejemplo, que un estudiante dominicano, con 15 años de edad, tiene un nivel de desempeño en el área de las ciencias, equivalente a 7 años menos de escolaridad que sus pares de Singapur. Agrega que en promedio, el 52% de los estudiantes latinoamericanos presenta un bajo nivel de desempeño en el área de las ciencias, mientras que el número de estudiantes dominicanos que se ubica en esta categoría asciende al 86%”.
A juicio de Educa, sorpresivamente, el país muestra resultados mejores a los esperados en lectoescritura, ubicándose por encima de países como Argelia, Kosovo, Macedonia y Túnez, y a 40 puntos de distancia, equivalente a un año de escolaridad, detrás de Perú, el país más próximo en la región.
Mármol resalta valentía del país
José Mármol, presidente de Educa, destacó la valentía del país y de sus autoridades al someterse a la evaluación rigurosa de una entidad como la OCDE y de una prueba en la que participa un selecto grupo de países.
No obstante, dijo que debe llamar a la reflexión de las instituciones públicas y privadas del sistema educativo que, mientras un país como Singapur, con un tamaño similar a la provincia de Samaná, es capaz de ubicar a casi 40 estudiantes de cada 100 en el nivel de excelencia, solamente uno de cada mil estudiantes dominicanos alcanzan ese nivel.
“Por lo tanto, esta medición en 2015 tiene como única utilidad el constituir un punto de partida para que en las siguientes pruebas que se apliquen en 2018 y en 2021, se evalúe el grado de avance hacia la calidad”.
El presidente de Educa afirmó que el país trabaja en la dirección correcta y es de esperar que en los años por venir cada vez más estudiantes dominicanos reflejen mayores niveles de calidad.
Recomendaciones
La ONG destacó que el director de Educación de la OCDE y coordinador de las pruebas PISA, Andreas Schleicher, manifestó en una entrevista con la BBC Mundo, que la región de Latinoamérica debe trabajar en la reducción de las desigualdades de los aprendizajes entre los estudiantes, puesto que las familias de condiciones socioeconómicas más vulnerables no tienen la oportunidad de acceder a las mismas condiciones educativas que aquellos que provienen de familias más aventajadas.
Un segundo elemento señalado por Schleicher es el de fortalecer la carrera docente.
Según el especialista, ésta debe hacerse más atractiva y orientada hacia la profesionalidad. En cuanto a los currículos, indicó que el énfasis no debe estar en los contenidos, sino en hacer de los estudiantes actores que comprendan la esencia de lo que estudian y se apasionen por ello.
Condiciones económicas inciden en rendimiento
Es la primera vez que la República Dominicana participa en la rigurosa evaluación internacional, para lo cual, realizó en 2014, una prueba piloto que ayudó a seleccionar la muestra, la cual obtuvo un puntaje de 332 puntos de los 493 requeridos para obtener el estándar óptimo. Los cinco países que obtuvieron los mejores resultados de las pruebas PISA 2015, que se realiza cada tres años, fueron Singapur, Japón, Estonia, Finlandia y Canadá.
Para la OCDE, los estudiantes con menores recursos económicos tienen tres veces más probabilidades de tener un rendimiento bajo que los estudiantes con mayores recursos económicos, y los estudiantes inmigrantes tienen más del doble de probabilidades que los no inmigrantes de tener un rendimiento bajo.
