Doctora Hilda Iluminada Lafontaine López

Primera nefróloga dominicana1. Su vidaHilda Iluminada Lafontaine López nació en Samaná un 14 de septiembre; hija de Gabriel Lafontaine y la señora Austria López. Realizó sus estudios secundarios en el…

Primera nefróloga dominicana

1. Su vida

Hilda Iluminada Lafontaine López nació en Samaná un 14 de septiembre; hija de Gabriel Lafontaine y la señora Austria López. Realizó sus estudios secundarios en el Instituto de Señoritas Salomé Ureña, y luego ingresa a la Universidad de Santo Domingo, donde obtiene el título de doctora en Medicina en febrero de 1970. Casó con el también doctor, Rafael Pichardo, médico cardiólogo, con quien procreó tres hijos. Realizó post grado de Nefrología en la Universidad Autónoma de México y en el Hospital Notre Dame de Montreal, Canadá. Fue fundadora del programa de Trasplante Renal del Instituto Dominicano de Seguro Social, jefa del servicio de Nefrología del Hospital Salvador B. Gautier, co-fundadora de la Sociedad Dominicana de Nefrología, presidenta de esa organización en dos ocasiones y coordinadora de la primera residencia de Nefrología del Hospital Salvador Gautier, así como profesora de cátedras de Nefrología en la UASD, entre otros. La foto del 22 de agosto de 1961, nos muestra a Hilda mientras participaba en una actividad en la ciudad de Puerto Plata.

2. Su motivación por la Nefrología

Aunque en los últimos años de estudios universitarios no pensó en la especialidad de Nefrología, esta abnegada profesional cuenta que lo que la llevó a decidirse por la especialización fue una desgracia familiar que sucedió cuando ella apenas tenía diez años de edad, al ver fallecer en 1960 a su hermana Mariluz por insuficiencia renal aguda, ya que en el país no existían tratamientos avanzados para el problema. Este hecho marcó su vida, y con ese dolor en el corazón ingresó a la carrera de Medicina en la Universidad Autónoma de Santo Domingo, donde se graduó de médico en 1970. Su inclinación por la Medicina la adquirió de su padre Gabriel Lafontaine, médico militar, y por el que siente una profunda admiración, el cual vemos en compañía de la doctora el día de su graduación en 1970. En la actualidad, la doctora Lafontaine se destaca como una de las más conocidas nefrólogas dominicanas, con un ejercicio profesional de más de cuatro décadas.

3. Premios y Reconocimientos

Durante su dilatado ejercicio profesional, la doctora Lafontaine ha recibido numerosos reconocimientos por sus aportes al desarrollo de la nefrología en nuestro país. En 1997 recibió el premio Caduceo de Oro como médico distinguido, en febrero del 2002 la Asociación de Mujeres Médicas de la Asociación Médica Dominicana, le otorgó el premio Dra. Evangelina Rodríguez por su destacada labor en el área de educación y servicio; Premio Maestra de la Nefrología, por la Sociedad Dominica de Nefrología en octubre del 2008, Maestra de la Nefrología en marzo 2011; en septiembre del 2014 es reconocida como pionera en las residencias médicas y en octubre del 2015, por resolución del Consejo Directivo del Hospital Salvador B. Gautier, se designa con su nombre el servicio de Nefrología de ese centro hospitalario. La foto corresponde al momento en que se le reconocía como la iniciadora de las residencias médicas por parte de sus primeros alumnos doctores Guillermo Alvarez y Alberto Flores.

 

 

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