El director ejecutivo del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INDRHI), Olgo Fernández, informó este lunes que las lluvias dejadas por el paso de la tormenta tropical Erika aumentaron los niveles de algunas presas, pero que mantendrán el plan de racionalización del agua para el riego agrícola.
El funcionario explicó que producto de las precipitaciones a la presa de Valdesia le entraron 22 millones de metros cúbicos y a la de Jigüey 12 millones, mientras que la de Hatillo recibió 15 millones.
Dijo que el embalse de Rincón registró una entrada de 2.7 millones de metros cúbicos y Tavera dos millones de metros cúbicos, en tanto que la presa de Sabaneta también recibió buena cantidad de agua colocándose por encima de su nivel mínimo.
Fernández manifestó que la presa de Sabana Yegua, en Azua, registró un incremento en la entrada de agua lo que contribuye a una mejoría del riego agrícola.
Indicó que la sustancial mejoría en los embalses no significa de modo alguno que vaya a dejarse sin efecto el plan de racionalización del agua para el riego agrícola que puso en marcha el gobierno a través de las instituciones del sector.
Precisó que las precipitaciones dejadas por la tormenta Erika ayudan a paliar la situación del suministro de agua para el consumo humano y para irrigar los cultivos en las distintas regiones del país.
El director del INDRHI agregó que con los anuncios de más lluvias, siempre que beneficien las cuencas de los ríos que alimentan las presas, la situación podría cambiar radicalmente.
“Esto quiere decir que si continua el aumento en el nivel de los embalses, producto de nuevas lluvias, las restricciones para el riego agrícola podrían ser dejadas sin efecto”, expresó.