Romeo Santos demostró una vez más que es el rey de la bachata, al ofrecer su concierto “Fórmula Vol. 2” ante un Estadio Cibao repleto de fanáticos que desafiaron la lluvia para rendirse ante este ídolo de multitudes.Un escenario digno de un rey, con cuatro esculturas doradas de leones, efectos de luces especiales y dos pantallas gigantes que facilitaban ver al artista desde todos los ángulos, fue parte de la producción que concibió el empresario Saymon Díaz con el patrocinio de ron Brugal, para entregarle al público un concierto memorable.
Pasadas las nueve de la noche se apagaron las luces del escenario, anunciando así la salida de Romeo. Desde entonces, la fanaticada no dejó de vociferar su nombre, apareciendo la imponente figura del artista que ha llevado el ritmo dominicano a diferentes partes del mundo.
“Inocente” fue la primera canción de las más de 20 interpretadas por el cantante, con la cual inició una noche memorable para sus seguidores que esperaron horas en el aforo, sin importarles mojarse con la lluvia. Luego, fue desgranando uno a uno los temas que lo han llevado a la cima de la popularidad, como “Por un segundo”.
Durante toda la noche, el artista cantó al amor y al desamor, complaciendo a los miles de “romeístas” que tenían sed de verlo, recompensando así la ausencia de unos seis años sin presentarse en un escenario cibaeño, pues la última vez que estuvo aquí fue cuando aún era parte del desaparecido grupo Aventura.
“¡Dominicanos!”, fue la primera palabra dirigida por Romeo a su público, y esta fue como un detonante para que el público gritara con euforia. Luego gritó: “¡Arriba Santiago, el que se sienta orgulloso de ser dominicano ponga su puño arriba! ¡Arriba, arriba Santiago!”, poniendo a sus seguidores a saltar al unísono.
Una característica de sus conciertos es la interacción con su público, y esta vez no fue la excepción, pues Romeo se mantuvo hablando con los presentes. Con sus típicos movimientos pélvicos, que desatan diversas emociones entre los presentes, el bachatero continuó su entrega con el tema “Por un segundo”. Aquí pidió el celular a una fan que lo grababa, para auto filmarse y gritar “¡Ciudad Corazón, qué viva mi República Dominicana!”, siguiendo con la canción “Loco”, a dúo con su corista. “Mi corazoncito”, “Cancioncitas de amor”, “Su veneno”, “Promise”, “Infieles”, “Noche de sexo” y “Soberbio”, continuaron agotando el repertorio de Romeo que era coreado por todos los presentes, a quienes les propuso un brindis por los mejores fanáticos del mundo: “Ustedes los romeístas, los amo”.
Anthony –Romeo- Santos continuó su esperado concierto con la canción “La diabla” y “Llévame contigo”; en ese momento, pidió una chica que no le diera vergüenza decir lo que no le gusta. Subió al escenario a una fanática identificada como Wendy, para darle su acostumbrado beso, pero ésta fue más allá y se atrevió a tocarle las entrepiernas. Tras esto, siguió interpretando canciones como “Un beso” y “Necio”. Ahí sus coritas se adueñaron del escenario para interpretar el tema “Olvídame y pega la vuelta”, del dúo Pimpinela.
Luego de interpretar sus canciones “Mi santa” y “Eres mía”, Romeo retó a un joven del público para premiarlo con quinientos dólares si se sabía todas sus canciones; fue ahí cuando subió al escenario un romeísta confeso que le siguió el juego: el artista iniciaba una canción y el joven, identificado como Junior, seguía cantándola, demostrándole que se las sabía todas, para terminar el reto con el dúo “Ella y yo”, que el intérprete realiza junto a Don Omar. “Hilito”, “Si yo muero”, “Amor de madre”, “La boda” y “Obsesión”, completaron el repertorio, para concluir con la afamada canción “Propuesta indecente”, llevando aquí al escenario a una joven para repetir en la cama la escena de su pasado concierto en Colombia, y que se ha vuelto viral en las redes, metiéndose debajo de las sábanas con ella.